Los hechos de inseguridad fuera y dentro de los centros educativos, se reiteran en Ciudad del Plata. Esta vez fue en la “Escuela Técnica Alfredo Zitarrosa”, la institución educativa técnico-profesional, que está enclavada en una comunidad de pausado desarrollo barrial y que brinda enseñanza, contención y educación.
La pasada semana fue “titular” en todos los medios informativos y noticiosos y no por la buena labor que desarrollan auxiliares, docentes, alumnos y familia de la UTU Zitarrosa. Un ex alumno de la institución ingresó, saltando una valla perimetral, con un elemento similar a una arma de fuego, apuntando a alumnos, funcionarios y docentes.
El hecho se produjo en horas de la mañana y como resultado hubo pánico, desconcierto y debió internarse a una integrante de la comunidad educativa, quien horas más tarde ya se encontraba en su hogar, llevando tranquilidad a sus compañeros.
AFUTU (Asociación de Funcionarios de UTU), tomó la inmediata resolución de no dar más clases, retener el alumnado, comunicar a los referentes familiares y garantizar la vuelta segura de cada alumno a su hogar. Mientras tanto, en asamblea del gremio se declaraba el paro de actividades por 24 horas.
El día después de lo acontecido la situación continuó incambiada, a no ser por una denuncia pública que realizó la presidenta de AFUTU, Ana Borges (quien trabaja en la Zitarrosa). La dirigente sindical dijo que desde la Inspección Regional, se les impidió realizar la asamblea de afiliados. Según lo dicho por Ana Borges, poder “sesionar costó más de los que nuestros derechos nos amparan”, en alusión a la inesperada situación en el local.
OTRO DÍA | El jueves 8 de setiembre amaneció distinto. En el entorno del centro educativo se reforzaba la presencia de las fuerzas de seguridad ciudadana (había efectivos de la Comisaría 10ª y de la Guardia Republicana). Los funcionarios policiales, según se apreció, cambiaban los métodos de transporte; andaban a caballo, en moto, en móviles, pero siempre presentes durante toda la jornada.
Ana Borges y Diego Betancur, los voceros de AFUTU, el nuevo jefe de Policía de San José, Atilio Rodríguez y el director general de UTU, Juan Pereyra, dialogaron de forma informal fuera del local escolar, mientras que la Dirección e Inspección Regional, se reunió con las autoridades, pero el sindicato no participó y tras el encuentro no hubo declaraciones.
Ana Borges, presidenta de AFUTU, visiblemente molesta, dijo a los medios que el hecho “existió realmente, no mentimos”, al hacer referencia al informe de la Jefatura de Policía donde se dice que tras el relevamiento de cámaras de vigilancia no surgió evidencia de que el sujeto tuviera un arma de fuego.
El gremio presentó una serie de peticiones para las autoridades de la educación: contar con un equipo multidisciplinario para estudiantes y servicios de prevención para los funcionarios de forma permanente; contar con la figura de portería itinerante; reforzar el cerramiento perimetral; portería en todo el horario escolar; contar con presencia de la Dirección en entrada y salida de turnos; contar con más adscriptos para el turno dos y tres.
DECLARACIONES | El nuevo jefe de Policía de San José, Atilio Rodríguez, el jueves se reunió con la dirección de la UTU Zitarrosa y a la salida dijo a los medios que “desde Jefatura apoyaremos y estamos dispuestos a trabajar en pos de una mejor seguridad”.
También el director, Juan Pereyra, dijo que todo volvía a la normalidad, después de aclarado el hecho de inseguridad. Al cierre de esta edición, aún continúan los coletazos por parte de las autoridades, desconociendo al sindicato como integrante de las soluciones.
Vale agregar que mediante un comunicado, Jefatura de Policía informó el jueves, que luego de diversas tareas de inteligencia a fin de dar con el paradero del adolescente que ingresará a la UTU Zitarrosa, se produjo la detención del mismo, además de realizar otras tareas en la búsqueda del arma supuestamente utilizada por dicho adolescente. “Estamos en condiciones de informar que también fue recuperada el arma, tratándose de un arma de fogueo”, decía el parte.
Por Carlos García.
