Variedades

El sueño y los ciclos internos

5 Mins read

Los momentos dedicados a dormir, son fundamentales para mantener un buen estado de salud, ya que actúan como reparadores de todo el organismo. Pero aun más importante que dedicarle las horas necesarias al sueño, es adecuarse a los ritmos biológicos que el organismo requiere, para llevar adelante la reparación correcta.

Diferentes investigaciones aseguran que dormir en las horas adecuadas, permite mantener los ciclos internos equilibrados y evitar enfermedades. Se ha comprobado que alterar el reloj biológico trae serias consecuencias. Esto determina que en muchas ocasiones, los trabajadores que desarrollan sus tareas en la noche, estén expuestos a importantes desórdenes biológicos que a través de los años; pueden desembocar en una sucesión de problemas en la salud, muchas veces irreparables.

EQUILIBRIO | Para que el organismo desarrolle correctamente sus ciclos naturales, respetar las horas de sueño, permite mantener el equilibrio adecuado en todas las funciones del cuerpo, tanto física como psicológica y emocionalmente. El sano equilibrio entre horas de actividad y descanso, es fundamental para acompasar los ritmos internos del organismo.

Para algunos expertos, respetar las horas adecuadas para dormir, genera muchos beneficios. Como decía el viejo dicho popular, “la noche se hizo para dormir”, parece que después de tantos estudios, se ha podido comprobado científicamente.

Se ha demostrado que las personas que trabajan por la noche, están expuestas a diferentes patologías y desordenes debido a que la producción de la hormona melatonina tiene lugar en el cerebro durante la noche, después de que el organismo haya estado expuesto a la luz diurna. Pero este proceso se ve alterado en las personas que permanecen despiertas durante la noche, de manera que su organismo no dispone de suficientes niveles de este antioxidante natural capaz de proteger al ADN de daños celulares.

Asimismo, se cree que al no descansar adecuadamente durante el día, debido a ruidos o mucha luz, esto va debilitando el sistema inmunológico, volviéndolo más vulnerables a enfermedades.

La melatonina es una hormona que está en todos los seres vivientes y su concentración varía según los ciclos diurnos y nocturnos. Se produce, principalmente, en la glándula pineal y participa en una gran variedad de procesos celulares, neuroendocrinos y neurofisiológicos. De no producirse la cantidad necesaria de esta hormona se altera el ritmo circadiano y puede provocar graves problemas de salud.

Debido a que muchos no tienen la posibilidad de elegir el turno de trabajo, hay  especialistas que recomiendan a quienes tengan estas actividades, que cuando sea su hora de descanso lo hagan en un ambiente totalmente aislado de ruidos y de la luz, para que su sueño sea más reparador.

En invierno cuando las noches son más largas, el cuerpo se adapta a dormir más horas, lo que demuestra que siempre existe una correlación entre los ritmos naturales y los seres vivos. Esto también establece que el cerebro al tener más horas de sueño, libera más melatonina, la hormona que regula el sueño y la vigilia. Muchos animales, como los ciervos o los osos, responden a estos ciclos de forma natural, para aparearse o hibernar.

En el caso de las personas, también se establece esa correlación ya que, al dormir más horas en invierno, producen más anticuerpos y esto les permite combatir muchas de las enfermedades de la estación.

Al respecto, el descubrimiento del reloj biológico que regula el funcionamiento del cuerpo humano y otros organismos, hace ya algunos años, más precisamente en 2017, fue premiado con el Nobel de Medicina. Los estadounidenses Jeffrey Hall, Michael Rosbash y Michael Young compartieron el galardón por haber desentrañado “los mecanismos moleculares que controlan los ritmos circadianos”.

ESTUDIOS | A pesar de que el tema del reloj biológico ya había sido expuesto desde hace décadas por otros científicos, no fue hasta los trabajos de estos tres estadounidenses que se pudo demostrar científicamente. La cronobiología es la ciencia que estudia estos aspectos del sueño, y a partir de la misma, los científicos investigaron para exponer su teoría.

Estos estudios permitieron demostrar que todos los seres vivos, plantas, animales y los humanos adaptan su ritmo biológico de manera que esté sincronizado con las revoluciones de la Tierra y que alterar de forma constante el estilo de vida con el ritmo del reloj interno, desencadena una serie de alteraciones en el organismo que pueden aumentar el riesgo de contraer enfermedades como el cáncer, enfermedades neurodegenerativas y trastornos metabólicos, como la diabetes tipo 2.

De acuerdo a los expertos, estos desajustes también pueden desembocar en otro tipo de patologías como trastornos del sueño, así como con la depresión, el trastorno bipolar y la función cognitiva.

Como todo en la vida, no fue una tarea ni fácil ni rápida. Los tres expertos debieron trabajar durante muchos años para llegar a demostrar cómo el reloj biológico al alterarse en sus ritmos naturales, termina lesionando algunas funciones vitales de las personas. Michael W. Young en la Universidad Rockefeller de Nueva York, y Jeffrey C. Hall y Michael Roshbash, de la Universidad Brandeis de Boston, trabajaron en experimentos desde 1984, descubriendo cómo funcionaba ese reloj biológico. Para ello aislaron un gen llamado period gene (gen del período) en una mosca de la fruta. Posteriormente se demostró que se trata de un mecanismo biológico muy antiguo, conservado a lo largo de la evolución, a medida que se han sucedido las especies, y que también regula el funcionamiento del cuerpo humano.

“Antes de que la atmósfera tuviera su composición actual (…), la Tierra giraba sobre su eje, y el ciclo de luz y oscuridad tuvo un impacto en los inicios de la vida”, declaró Michael Rosbash.

Los investigadores determinaron que este gen era uno de los que estaba implicado en el ciclo circadiano o reloj biológico de los seres vivos, el responsable de que nos dé sueño de noche o de que estemos más alertas de día. Después descubrieron que el “period gene” y otros genes contienen instrucciones para fabricar cerca de una docena de proteínas encargadas de regular estos relojes internos.

Michael Young, explica que “la importancia de los ritmos circadianos en nuestra vida diaria tiene que ver con que estos controlan el sueño y los patrones de alimentación”, son “impulsados biológicamente y persisten incluso si hay señales contradictorias del exterior”.

Hall y Rosbash descubrieron incluso que la proteína PER se acumula en el núcleo de las células durante la noche y que sigue un ciclo diario. Sin embargo, dicha proteína se produce en el citoplasma de las células y no se sabía cómo llegaba al núcleo. Para estos investigadores, aún faltaba algo por descubrir.

Fue Michael Young quien encontró la pieza que faltaba en 1994. Descubrió un segundo gen relacionado con el reloj biológico al que llamó timeless. Identificó la proteína TIM que ese gen produce y demostró que la proteína TIM se une a la proteína PER de modo que, cuando están juntos, pueden entrar en el núcleo de las células e inhibir el gen period. Se descubrió asimismo cómo la luz solar ayuda a sincronizar el reloj biológico del cuerpo humano y cómo la exposición a un exceso de luz a horas inapropiadas puede perturbar dicho reloj.

Así, se demostró que el reloj principal del cuerpo humano está formado por neuronas del núcleo supraquiasmático, situado en la base del cerebro. Estas neuronas están directamente conectadas a las células que captan luz en la retina.

Declaró Young que es fundamental tratar de adaptarse a esos ritmos y en lo posible, dormir de noche las horas necesarias porque, “si trabajas de noche, actúa como si estuvieras en otra zona horaria”.

Por todo ello, además de una buena alimentación, tomar sol y hacer ejercicio con regularidad, respetar los ritmos de sueño y vigilia y ajustarlos a los horarios adecuados, permiten mantener una buena calidad de vida.

 

Por Yudith Píriz.

Related posts
Variedades

Las mandarinas, sabores de otoño

4 Mins read
La presente estación del año tiene, sin dudas, un especial encanto. Todo se transforma y la vegetación particularmente, va tomando su característico…
Variedades

La quinua, un súper alimento

4 Mins read
Muchos de los granos y semillas que se consumen en la actualidad, tienen una larga historia, y los orígenes de algunos de…
Variedades

El maní, un alimento con interesantes propiedades

3 Mins read
Para los días algo más frescos y como antesala del invierno, se comienzan a buscar aquellos alimentos que se adecuan a la…
Periódico La Semana presenta su 2 x 1
Promoción limitada $ 295/mes

Suscribite a la experiencia digital completa del PERIÓDICO LA SEMANA , acceso sin límites a todos nuestros contenidos. Con tu suscripción DIGITAL te enviamos la Edición Impresa GRATIS !!! Nuestros suscriptores de la Edición Impresa tendrán Acceso GRATUITO E ILIMITADO a todos los artículos digitales !!!