Las diferentes variedades de plantas y sus aceites esenciales, son en su gran mayoría, potentes aliadas de la salud. Dependiendo de sus propiedades, suelen ofrecen una amplia cantidad de beneficios que ayudan a aliviar diferentes patologías, además de ser en muchos casos, depuradoras y preventivas de muchas otras.
Una de ellas, el ajenjo, resulta ser una hierba tan efectiva como potente, para tratar desequilibrios orgánicos.
CARACTERÍSTICAS | El ajenjo, hierba santa o artemisia amarga (Artemisia absinthium), es una de las hierbas que se utiliza desde tiempos ancestrales y que presenta importantes propiedades medicinales.
Es una planta perenne, herbácea, perteneciente a la familia de las compuestas y que suele crecer en zonas templadas, aunque se distribuye en casi todo el mundo debido a su fácil cultivo y adaptación a diferentes tipos de suelos. Se trata de una planta originaria de Europa, Asia y norte de África
Su uso se remonta al Antiguo Egipto, siendo también utilizada por griegos y romanos. Tanto sus flores como sus hojas, eran empleadas para expulsar parásitos y tratar afecciones de la piel, siendo conocida como un potente tónico amargo.
Debido a sus innumerables usos, en su momento recibió el nombre de “la madre de todas las hierbas”. Inclusive es muy considerada por la tradicional medicina china, por entender que se trata de una hierba altamente poderosa, principalmente en su función depurativa. En este caso, se la utiliza para las moxas, empleadas en la técnica de moxibustión.
Su principal componente es la tuyona. Presenta tallo recto y rizoma leñoso, hojas verdes grisáceo y con glándulas productoras de aceite. Sus flores son de color amarillo pálido.
Su principal característica es la de ser una hierba con un fuerte sabor amargo.
PROPIEDADES | En un consumo adecuado, el ajenjo ofrece interesantes propiedades medicinales.
Su potente sabor amargo, le confiere una de sus principales propiedades, la de ser una hierba digestiva. Ese sabor particular, está dado por principios amargos (absintina), su aceite esencial es rico en tuyona, de acción vermífuga y emenagoga, pero tóxica en dosis altas. Contiene sales minerales (nitrato potásico) y taninos.
Su amargor la coloca dentro de las especies que cumplen la función de limpiadoras de sustancias tóxicas que se van acumulando en el hígado. Esta acción le confiere la propiedad de hierba desintoxicante del organismo.
También actúa en todo el proceso digestivo, por lo que ayuda a tratar otros problemas como gases, malas digestiones o digestiones pesadas, halitosis, entre otras.
Al igual que las demás hierbas amargas, desarrolla un efecto tónico sobre el estómago, aumentando el apetito y estimulando la secreción de jugos gástricos. Debido a este factor, es una aliada para personas que presentan inapetencia, así como para los dispépticos (los que padecen de digestiones lentas y pesadas).
Se le atribuyen propiedades además sobre el correcto funcionamiento de la vesícula biliar, ayudando a mantenerla en buen estado y libre de impurezas.
Al aumentar la secreción biliar, ejerce sobre el hígado una favorable acción descongestiva y de estímulo de sus funciones. Resulta apropiado en los casos de insuficiencia hepática, y en la fase de convalecencia de las hepatitis víricas.
Tiene además, la propiedad de ser un potente emenagogo, actuando sobre el útero, provocando la menstruación; pero además, ayudando a normalizar los ciclos irregulares.
Se destaca por ser una planta antiparasitaria y al poseer propiedades antiinflamatorias, se suele incluir como uno de los remedios naturales para calmar trastornos reumáticos, musculares ayudando en casos de artrosis o artritis. Otra de sus interesantes propiedades, muy extendida desde hace siglos, es la de ser un remedio eficaz para tratar diferentes afecciones en la piel.
Otra de sus características, tiene que ver con los beneficios que otorga en la reducción de azúcar en sangre, por lo que es de ayuda en los casos de diabetes.
El ajenjo también, al ayudar en la desintoxicación, aporta energía y vitalidad al organismo.
En síntesis, el ajenjo es eficaz para tratamientos del sistema digestivo, mejora el hígado y la vesícula, reduce el dolor muscular y ayuda a combatir el dolor y la inflamación. También ayuda con el metabolismo, regula el ciclo menstrual, elimina toxinas y parásitos intestinales.
Un uso adecuado serían unos 10 a 20 gramos de planta por litro de agua. Para suavizar su amargor, se le puede endulzar con anís o miel. Para los trastornos digestivos, se toman 1-2 tazas diarias, antes de las comidas.
Uso externo: se la puede utilizar como insecticida. Se la utiliza para tratamientos en la piel de animales domésticos. Para ello se realiza una infusión de hojas de la planta y se rocía sobre el pelo de los mismos. También es eficaz para combatir plagas en el jardín y huertas, fumigando las plantas con una preparación de la planta. Como loción aplicada sobre la piel, ahuyenta a los mosquitos. Y colocando ajenjo seco en saquitos de tela entre la ropa, evita la propagación de polillas.
Importante: Esta planta no la deben consumir las embarazadas y/o en períodos de lactancia, como tampoco los niños pequeños. Tampoco conviene a quienes padecen úlcera gastroduodenal o gastritis.
Su consumo deber ser regulado y nunca se la debe tomar por un largo periodo de tiempo (máximo una semana). De cualquier manera, siempre es aconsejable consultar con un especialista para indicar el tratamiento adecuado dependiendo de la patología.
*Este contenido tiene sólo fines informativos y educativos. No está destinado a reemplazar el asesoramiento ni ningún tratamiento médico.
Por Yudith Píriz.
