Un nuevo conflicto se ha desatado en la empresa Faises (Symbiosis), una de las dos concesionarias para la producción de cannabis, a partir del despido de una de las funcionarias y delegada sindical, ocurrido en la tarde del lunes 12. El sindicato de los rurales se declaró en conflicto a nivel nacional y piensa llevar ante la Justicia el caso para solicitar el inmediato reintegro de la funcionaria.
La trabajadora Adriana Viera -que por error en el comunicado del sindicato se la llama Andrea-, contó a La Semana cómo se dieron los acontecimientos que desembocaron en su despido. Según dijo la funcionaria de Faises, el pasado lunes 12 ella fue a reclamar ante el encargado un descuento salarial de tres días por no haber concurrido a trabajar durante el anterior conflicto. Según el convenio vigente ese descuento no se puede realizar y eso es lo que reclamaba la trabajadora.
Viera dijo que el encargado de la empresa insistió en que él estaba en lo cierto y ante esta actitud de González, la trabajadora le informó que iban a ir a juicio ante lo cual el tono fue subiendo. Viera intentó que el funcionario de Faises recapacitara, que era ridículo ir a un juicio por un dinero que para ellas puede ser importante pero que para la empresa no es nada, pero no hubo cambio en la actitud asumida por el encargado y la discusión terminó abruptamente, con la promesa de litigar.
La funcionaria volvió a su tarea, pero sobre una y media de la tarde, la secretaria del encargado llegó a anunciarle que tenía una suspensión por haber faltado el sábado 10 sin avisar. Viera dijo que en efecto faltó por una actividad sindical y que el sindicato (la UTRASURPA), se había olvidado de pasar el pedido de horas sindicales. Sabedora ella de esa situación, mandó a avisar con una compañera, pero si bien relató esto mismo a la secretaria, pero la medida continuó firme y fue a más, porque Adriana Viera comenzó a llorar, abandonó su puesto de trabajo y la Secretaria volvió ante ella para anunciarle que tenía una segunda suspensión por una falta sin aviso anterior.
Allí no más, Adriana se fue a su casa y al rato de llegar recibió un telefax en el que se le informaba que estaba despedida por mala conducta y por romper una planta al retirarse de allí, algo que ocurrió por accidente en el medio del ataque de llanto que le había dado a la trabajadora a partir de las suspensiones.
La delegada sindical de inmediato se comunicó con el dirigente Germán González, que inició una importante difusión de la situación declarando a la Unión de Trabajadores Rurales y Agroindustriales del Sur del País en conflicto nacional por este despido antisindical.
En principio habría una reunión en los primeros días de esta semana en el Ministerio de Trabajo (Adriana Viera no conocía la fecha exacta), para intentar que la empresa revea su actitud y en caso en que nada cambie, se procederá a ir ante la Justicia a partir de lo que establece la ley 17490 de fueros sindicales, bajo los auspicios del abogado de la UTRASURPA Roberto Placeres.
También apelarán a realizar movilizaciones masivas en respaldo a la funcionaria y delegada sindical, ya que según comentó la propia Adriana Viera, a la empresa le molesta que el conflicto se ventile en los medios. “A partir de una aparición mía en Canal 12 me han perseguido”, dijo Adriana Viera.
Ampliación en la edición impresa del martes 20
Por Javier Perdomo
