El 8 de diciembre comenzó a cumplirse el servicio de guardavidas en todas las playas de San José. Los funcionarios bajarán a las playas hasta el 10 de marzo de 2024 inclusive y volverán a trabajar durante la Semana de Turismo, es decir del 23 al 31 de marzo.
El servicio se brinda todos los días, de 10 a 13 y de 14 a 19 horas en los balnearios Picada Varela, Boca del Cufré, Kiyú, Playa Pascual, Villa Olímpica, Colonia Wilson y Arazatí.
La Semana ha intentado hablar con voceros de la Agrupación de Guardavidas de San José para conocer en qué fase está el conflicto iniciado un par de meses antes de comenzar la temporada, pero sus dirigentes han informado que se dirigirán a la población únicamente por comunicados de prensa.
El último de ellos hace referencia a una reunión mantenida con la directora de Deportes de la Intendencia Carolina Pistón en la cual la jerarca les anunció que no se logró conseguir a través de las demás direcciones de la Intendencia un DEA (Desfibrilador Externo Automático), para cada balneario.
En opinión del gremio de los guardavidas, “la falta de esta herramienta es muy preocupante y nos pone en una situación de extrema vulnerabilidad”, debido a que el DEA “es fundamental a la hora de activar la cadena de supervivencia. Si la víctima no tiene signos vitales y luego de haber comenzado con los masajes cardíacos continúa así, se utiliza esta herramienta que realiza pequeñas descargas eléctricas para normalizar el ritmo cardíaco de la persona y sacarlo de un paro cardiorrespiratorio”.
“Siendo objetivos nuestra función se está realizando de forma incompleta ya que al no contar con el DEA trabajamos solo desde la prevención, siendo imposible revertir una situación como la anteriormente mencionada”, agrega el comunicado, que culmina diciendo que “el argumento que la administración nos da sobre la falta de esta crucial herramienta es la falta de recursos económicos para realizar dicha inversión”.
Imagen ilustrativa, tomada de la web.
Por L.S.
