El Movimiento de Participación Popular (MPP-FA), tiene como estrategia hacer recorrida de sus legisladores por todo el interior del país de forma periódica, realizando encuentros con la prensa y con la militancia del Frente Amplio en general. Es en ese marco que el pasado jueves estuvo el diputado Sebastián Valdomir en el departamento de San José, acompañado por su compañero de bancada, el diputado josefino Nicolás Mesa.
En estas recorridas, los legisladores se refieren a los temas de la agenda. En este caso, Nicolás Mesa comenzó refiriéndose a la reciente renuncia de la ministra de Vivienda Irene Moreira, un caso que deja en evidencia “la inestabilidad que tiene la coalición de gobierno”, según lo dicho por él.
Continuó diciendo que “si analizamos la conferencia de Manini Ríos hay mucho mensaje que va a ser producto de análisis. Esta situación puntual es un pedido de renuncia del Presidente de la República a la Ministra de Vivienda, por la adjudicación de viviendas a militantes de su partido. En principio fue una pero después aparecieron otras y por eso desde el FA se analiza la posibilidad de encarar alguna acción penal” contra la ahora Senadora.
Nicolás Mesa dijo que lo peor es que Cabildo Abierto no hizo “autocrítica” sobre “esa forma de hacer política al asignar de forma arbitraria una vivienda y todavía dicen que si lo tuvieran que volver a hacer lo harían, manteniendo esa lógica de hacer política”. También cuestionó que “quien asume como Ministro es una persona del mismo partido, que mantiene esa lógica de hacer política. Eso nos lleva a las viejas épocas del clientelismo más puro”.
CHANTAJE CABILDANTE | Sebastián Valdomir fue integrante de la comisión parlamentaria que tuvo a su cargo el estudio de la reforma de jubilaciones que realizó el gobierno. Consultado sobre si las diferencias entre los integrantes de la coalición de gobierno se acentuaron durante el debate, dijo que en ese debate que se dio en Diputados “fue el momento más álgido de las discrepancias que hay dentro del gobierno. En el oficialismo estaba la versión inicial que sostenía el equipo económico, el Ministro de Trabajo y el redactor del proyecto, y en ese proceso que se inició el 7 de febrero y terminó a fines de marzo, Cabildo Abierto hizo desde el primer momento una tarea de chantaje, de posicionamiento de sus propios énfasis y cuestionamientos al proyecto y eso motivó que la discusión se extendiera”.
Según el legislador del MPP, “ese no era el plan que tenía el gobierno, a medida que iba pasando el tiempo la gente se iba poniendo en contra. Hoy hay una mayoría de la población que se posiciona en contra, porque va a tener que trabajar más años y en el mejor de los casos, cobrar lo mismo o si no menos que ahora. Eso la gente lo leyó bien, se informó y a medida que pasaban las semanas era evidente que había más gente se estaba posicionando contra este proyecto”.
Valdomir mencionó que era evidente la tensión que existía entre los diputados del oficialismo, al punto que, dijo, “no había ningún tipo de confianza en las cosas que se proponían”.
En opinión del legislador, “los cambios operados, modificaron por completo el eje de la reforma; en febrero se nos dijo que no había margen para aumentar el gasto previsional con los cambios incluidos en el Senado; de allí a lo aprobado hay un punto más del PBI. A nosotros nos dijeron que no había margen de cambio, pero fue tal el desbarajuste, el descontrol interno del oficialismo que tuvieron que salir a negociar y además, pasándose cosas por debajo de la mesa, porque allí está la atención reparatoria especial para las víctimas de la violencia en la década del 60, la prisión domiciliaria para mayores de 65 años”.
De cara al futuro, considera el legislador, que “al terminarse de votar la reforma, la coalición ya no tiene más agenda porque se terminó todo lo incluido en el Compromiso con el País; ahora la coalición va a tomar cada tema y analizar el posicionamiento ante cada tema y ver qué votará cada socio, pero ya no hay una coalición programática”.
En el marco de esas distancias internas es que se da ese “pésimo ejemplo de corrupción instalada en el Ministerio de Vivienda, que se suma a la corrupción y al tráfico de influencia instalada en la Torre Ejecutiva o a la entrega del puerto a una empresa extranjera”.
OTRA LEY | Consultado sobre la posibilidad de generar un plebiscito de reforma constitucional que haga caer la reforma recién votada, dijo Sebastián Valdomir que “nosotros como MPP tenemos una posición contraria a esa opción, porque pensamos que una ley se deroga con otra ley, que estamos en un momento en el cual el FA tiene que salir a hablar con la sociedad y para desactivar esta mala reforma hay que ir a discutir con el sector productivo, con los empresarios, con la academia, con los trabajadores y construir una reforma completa que intervenga sobre los problemas del trabajo en el siglo XXI y que meta el financiamiento, que esta reforma no hace, como uno de los ejes de debate principal”.
“Ese diálogo político y social, a diferencia de lo que hizo el gobierno con la comisión de expertos, hay que hacerlo sin apuro y tratando de construir una propuesta de consenso”, dijo el legislador del MPP, que agregó que entiende su grupo político que “sea del color que sea, el próximo gobierno va a tener que hacer una nueva reforma, porque esta no atendió nada el financiamiento”.
Consideró que el mayor problema que tiene la nueva norma es “el hecho de aumentar la edad a 65 años para todos los trabajadores y todas las trabajadoras va a tener un impacto enorme en su salud. Es gente que va a perder la posibilidad de jubilarse por jubilación común, que ya tiene problemas para jubilarse con 60 porque llega todo cascoteado, con problemas de salud y eso genera problemas importantísimos. Con 65 años esos problemas serán mayores y el impacto se va a empezar a ver a corto plazo”.
OPTIMISTA | Por último Nicolás Mesa se refirió a la realidad política del FA en el departamento de San José, diciendo que la organización política “viene creciendo en San José” y entre los hechos que según demuestran eso es que “hemos tendido puentes con organizaciones del sector rural con las cuales nunca tuvimos diálogo. Ahora empezamos a tener un vínculo, siempre en tono de escucha, para así poder elaborar el programa para nivel nacional y a nivel departamental”.
“Estoy convencido que el FA va a ser gobierno a nivel nacional en 2024 y soy de los convencidos que tarde o temprano, el proceso electoral en San José, va a desencadenar en un gobierno frenteamplista en el departamento”, dijo Nicolás Mesa.
Por Javier Perdomo.
