Durante este mes de junio, el grupo Manos Laboriosas de Puntas de Valdez está cumpliendo sus 20 años de actividad y fue la señora Mirta Rodríguez, quien en nombre de todas las integrantes del grupo, habló con La Semana sobre esta fecha importante para todas las que lo integran desde comienzos del presente siglo.
Mirta, es parte de Manos Laboriosas desde hace 18 años, pero para contar la historia del grupo hay que remontarse un poco más atrás en el tiempo, ya que todo empezó con una reunión realizada en la escuela 26 de Puntas de Valdez. A partir de ella, comenzaron un camino que cumple una importante obra social, que se lleva adelante con mucha discreción y con manos que se extienden a quien lo necesite.
Mirta contó que cuando ella ingresó al grupo eran parte de él “Mary Travieso, Mary Bermúdez y la señora de Avondet”. Contó que ella se integró casi de casualidad: “un día fui a la panadería y me encontré con Mary que me consultó si quería ir a Manos Laboriosas. Le dije que no, porque no sabía hacer croché, pero me comentó que era para arreglar ropa”, contó. Allí y desde entonces, aprendió a hacer croché y en la actualidad es una de las encargadas de la venta de prendas que se pueden conseguir a un precio accesible para cualquier vecina o vecino que concurra a comprar ropa.
Respecto a cuántas personas son parte de «Manos Laboriosas», Mirta dijo que al momento, “somos como 20. Nos reunimos los lunes (para planificar y tomar decisiones) y los jueves vendemos”, al público que se acerca para recorrer y aprovecha para llevarse alguna prenda.
En una habitual jornada de trabajo del grupo, Mirta comentó que empieza por “arreglar la ropa usada que nos llega”, para luego hacer una clasificación, separando la ropa manchada y la que se encuentra descosida. La ropa que llega rota, no se usa para la venta y se destina a los talleres que la utilizan para limpiar, a modo de trapos.
Contó la entrevistada que “la gente que va a las venta de los jueves, dona y también compra ropa” agregando que “algunos no quieren entrar porque les da vergüenza entrar” pero finalmente termina llevando algún buzo, pantalón o camisas”. Mirta dice que hay ropa “de muy buena calidad”.
Además, en la feria que organizan cada jueves, puede encontrarse, ropa para trabajo, calzado, ropa de bebé y hasta trajes, con un costo de 10 pesos por prenda. También cuentan con coches para bebés, corrales y andadores, pero en este caso, el costo de cada artículo es de 100 pesos.
SOLIDARIDAD | Pero la venta semanal de ropa, no es la única actividad que realiza Manos Laboriosas; con lo producido de las ventas ayudan a mucha gente de Puntas de Valdez, Libertad y también San José de Mayo. El grupo apoyan a aquellas personas que pasan por una situación de urgencia, como el caso de alguien que esté cursando una enfermedad grave y no pueda solventar sus gastos habituales, como por ejemplo, pagarse la cuenta de la luz.
Además, Manos Laboriosas cuenta con varias sillas de ruedas, muletas, bastones y andadores, que se prestan sin costo alguno a personas que los necesitan, por un plazo de hasta seis meses.
Esta idea surgió como “una necesidad de una vecina que precisaba una silla de ruedas en su momento y no podía pagarse una”, contó Mirta. Desde entonces, fueron adquiriendo más sillas, que son repartidas para personas particulares que las necesiten.
A partir de los fondos recaudados en las jornadas de ventas que realiza el grupo, una de sus integrantes, consulta con todo el grupo de trabajo para saber cuál será el destino del dinero reunido y ahí se define su destino, que según Mirta, puede ser para conseguir materiales para arreglar las prendas o si se destina para comprar alguna silla de ruedas en caso que algún vecino la necesite y deban extender la mano para prestarle a esa persona que la necesita y no puede pagársela.
Los fondos que se recaudan las ventas de ropa y prendas elaboradas por ellas, también son volcados a otras funciones sociales, colaborando por ejemplo con la escuela local, el “baby fútbol” y en alguna oportunidad, “también se colaboró con un vecino al que se le voló el techo de su vivienda”, según lo contado por Mirta Rodríguez.
EN SOCIEDAD | En estos 20 años de trabajo, Manos Laboriosas ha estado con su puesto en casi todas las festividades de la localidad, por ejemplo la Semana de Puntas de Valdez. Respecto a ello, Mirta comentó que “a veces se abre, porque la gente dona mucha lana a Manos Laboriosas, con las cuales elaboran colchas en croché de una y dos plazas. Las de una plaza, tienen un costo de 700 pesos y las de dos plazas, se venden a mil pesos”.
El apoyo de la comunidad de Puntas de Valdez a Manos Laboriosas es mucha y para demostrarlo dijo que la sede del grupo “está de ropa que da miedo” y el éxito es tal, que cuando ella llega a las 13 y 30 para atender al público, “ya hay gente sentada esperando, en los bancos”, ubicados en la plazoleta de la Junta Local de Puntas de Valdez. Manos Laboriosas abre al público los jueves de 13 y 30 a 16 y 30 y cambia al horario de la mañana en verano.
Por Nelson Guillermo.
