El fin de semana no se presentaba nada bueno para eventos al aire libre debido a las lluvias que cayeron desde la noche del miércoles y hasta el viernes. La docente de los cursos de gastronomía de la UTU Libertad Sirhley Rodríguez, al ser consultada sobre qué pasaría con la anunciada elaboración de la paella valenciana para el día sábado en la plaza de los 33 de Libertad, decía que igual se haría, pero que toda la actividad se concentraría en el local de la “escuela industrial”.
Finalmente eso no debió ocurrir -o por lo menos ocurrió a medias-, ya que pese al intenso viento matinal, el sol acompañó el día para que el evento que hace más de 10 años -únicamente interrumpido por la pandemia-, se realiza en el centro de la principal plaza libertense, pudiera llevarse adelante con casi absoluta normalidad.
No ocurrió como otros años, en que la gente desde pasadas las 10 de la mañana ya se instalaba en la plaza para presenciar la elaboración del plato tradicional español, que supervisan Rodríguez junto a su colega Hugo Freire, a causa del intenso viento acompañado de frío, pero sí se podía ver desde lejos una marea blanca, compacta, ante el fuego de los quemadores en los que se posaban enormes paelleras, que comenzaban a recibir los ingredientes del plato.
Algunos alumnos/as, alimentaban las paelleras, en tanto que otras/os, intentaban que no se volaran las mesas o potes que quedaban vacíos; porque el viento era intenso. La docente Sirhley Rodríguez, estaba a cargo del cobro de las viandas reservadas o las vendidas en el momento; la directora María Fernanda Umpiérrez, ayudaba en todas las tareas, menos en la paella, por completo a cargo de 57 estudiantes y del docente Hugo Freire.
ENTREGA | Sobre las 12 ya había aumentado de forma considerable el número de personas que esperaban su vianda en la plaza, que comenzaron a ser despachadas después de las 12 y 30. Según lo contado el domingo por la docente Rodríguez, salieron 420 porciones (la recaudación estaría en unos 200 mil pesos, ya que las viandas se vendían a 480 pesos), muchas de las cuales fueron vendidas el mismo sábado, pero otras quedaron para ser vendidas congeladas en estos días en la UTU, ya que debieron “levantar campamento” más temprano que de costumbre, obligados por el fuerte viento, que sopló con mayor intensidad sobre el mediodía (de media tarde en adelante comenzó a amainar).
La docente Sirhley Rodríguez, agradeció a quienes adquirieron su
s viandas y comentó que quien desee comprar una, puede hacerlo comunicándose con el 4345 2153 de la UTU o con cualquiera de los alumnos y alumnas que trabajaron el sábado. Todo lo recaudado en esta movida se reinvierte en materiales de estudio.
Imágenes: Sebastián Parentelli.
Por L.S.