UTE lanzó el llamado Desafío Eco-Ute y un grupo de alumnos de la Escuela Técnica de Libertad está entre las 18 instituciones de nueve departamentos, que participa de él. El objetivo del proyecto es que cada escuela participante diseñe y construya un automóvil eléctrico alimentado a batería; al finalizar todos se encontrarán en una competencia.
HISTORIA | Aunque parezca novedoso en este tiempo, la historia del automóvil eléctrico comenzó en el siglo XIX, cuando Robert Anderson diseñó el primer vehículo eléctrico puro; fue entre 1830 y 1840. A su vez, en los Países Bajos, el profesor Sibrandus Stratingh de Groninga construyó con la ayuda de su asistente vehículos eléctricos a escala reducida en 1835. En Estados Unidos, el primer vehículo eléctrico se estrenó gracias al químico Williams Morrison en 1890.
A finales del siglo XIX, los coches de gasolina comenzaron su recorrido de manera independiente, por el trabajo de ingenieros alemanes. Por un lado Karl Benz y por otro Gottlieb Daimler y Wilhelm Maybach. De forma casi paralela se presentaban vehículos eléctricos que no tenían los compromisos de los coches a vapor o gasolina. No hacían ruido, no expedían grandes cantidades de humo desagradables y eran más fáciles de manejar. Así que comenzaron a ser una opción bastante popular en las grandes ciudades, especialmente para las mujeres debido a su mayor facilidad de conducción.
Es entonces cuando esta ola de demanda de los vehículos eléctricos, es una gran atracción para muchos inventores. De hecho, Thomas Edison trabajó en varios prototipos de autos eléctricos, algunos junto a su amigo Henry Ford.
Pero en 1908, sale a la venta el primer coche impulsado a gasolina por Henry Ford, el modelo T. Era más rápido, tenía un diseño más atractivo además de ser mucho más económico que el resto de su competencia. También ayudó el hecho de que Ford era un excelente empresario. Pagaba más dinero por hora a sus trabajadores, y bombardeó todo el mercado con su publicidad. En 1920 un auto eléctrico costaba 1750 dólares y uno de gasolina 650, así que esto, sumado al descubrimiento de grandes yacimientos de petróleo, llevó a que se impusiera el vehículo a combustible y en 1935, desapareció de las calles el auto eléctrico.
HOY | Pero en el presente esta historia está cambiando, el auto eléctrico vuelve a tener consideración porque la conciencia ecológica ha ido ganando las mentes. Así, surgen movidas como las de UTE.
El Desafío es organizado por el Automóvil Club del Uruguay (ACU) y cuenta con el apoyo del Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM), el proyecto Movés, el Consejo de Educación Técnico Profesional (CETP-UTU), y la alianza estratégica de UTE. “Nosotros vamos a proveer de kits, iguales para todos y hay partes de estos kits que no se pueden tocar, pero sí otras que se pueden trabajar y modificar y tienen que diseñar y construir un vehículo eléctrico con nuestra ayuda y de los profesores y el 10 de noviembre se va hacer un evento final pero teniendo en cuenta que la medición del auto nos va a dar un ganador de un evento”, explicó Ricardo Joubanoba, coordinador general del ACU.
En Libertad, Mauricio Martínez, Franco Idra y Ezequiel Álvarez, son los tres estudiantes de segundo año de mecánica de la Escuela Técnica, que participan del desafío, junto a Ángel Rodríguez, su docente.
EXPECTANTES | Como es la única escuela del departamento que está participando del desafío, toda la institución, independientemente del año en curso, están comprometidos con este reto al que se están enfrentando. Así lo dijo Ángel Rodríguez, docente encargado del proyecto: “Ellos nos dan un kit, que contienen ciertos elementos, como las ruedas, el motor, las baterías y otros complementos que debemos incluir en la construcción. Hay cosas que podemos modificar, pero hay otras que no, una de ellas es el motor. No podemos modificarlo de manera alguna, todos los que participamos debemos tener un auto con el mismo motor,” dijo.
En “la competencia no se va a medir la rapidez del auto, si no otras características”, dice Franco Idra. “La competencia consta en resistencia, carrera, picada y lo que llaman la prueba del salmón”, detalla.
“Para mí es algo nuevo que se mete en la tecnología y en el desarrollo de mecánica, y está bueno porque es algo que se aprende”, continuó diciendo.
“El parque automotor está cambiando, los vehículos a combustión están dejando de ser tendencia por un tema ecológico”, dice el profesor Ángel Rodríguez y cree que “el auto eléctrico es algo a lo que todas las marcas reconocidas están apuntando. Y está muy bueno que ellos empiecen a hurgar en la tecnología de los autos eléctricos. Obviamente no es exactamente como nosotros lo estamos desarrollando, pero tiene varias similitudes. Y por supuesto también es una iniciativa muy buena, para nosotros los docentes, por el hecho de que hay muy poca información de esta tecnología”.
Ezequiel Álvarez, comentó que una de las estrategias de los organizadores es que las escuelas participantes deban desarmar el auto que lleven y entonces se sortearán las partes como el motor, así tendrán seguro que esas piezas que no debían ser modificadas, sigan intactas. Es decir, otros concursantes competirán con los motores de los otros.
“ME GUSTA” | Lo que se juega ahí, es la habilidad del piloto y la preparación del auto, dice Mauricio Martínez. “En realidad la competencia ya empezó, porque una de las reglas es registrar todas las fases de la competencia en video. Por ejemplo, cuando recibimos el kit y debimos subirlo al perfil del Facebook de Eco Ute. Los que tengan más ‘Me Gusta’, gana. Así que el llamado a toda la comunidad josefina es para que voten por nosotros, por la Escuela Técnica Libertad. Además este tipo de registro audiovisual, debemos hacerlo dos veces más, este que fue al principio, otro cuando vayamos a mitad del proyecto y el tercero cuando estemos realizando las pruebas”, contó
Walter García, profesor de electricidad y Ángel García como los profesores al frente de este proyecto, junto a 19 alumnos de la UTU de Libertad, son los que están representando el Desafío Eco UTE 2019.
El profesor Rodríguez, afirma que no sólo el grupo de estudiantes del 2 año de mecánica está de lleno con este proyecto, sino que toda la escuela esta verdaderamente comprometida. “Por ejemplo, habrá cuatro pilotos (dos titulares y dos suplentes), jefe de boxer con un par de compañeros más. Todo lo que te digo será durante la carrera. Pero en el proceso de fabricación, todos están involucrados. Además los otros grupos están participando, incluyendo el nuevo grupo de tercero. Así que están todos los grupos de mecánica. Y el resto de la escuela, igual, directa o indirectamente”, dijo Rodríguez.
El llamado principal está dirigido a las empresas, comercios o personas particulares de todo San José, para que apoyen este proyecto. Bien sea con dinero, insumos o algún apoyo profesional.