Desde el 21 de julio y hasta el pasado domingo 6 de agosto, la ciudad de Lima fue la capital de la literatura latinoamericana por la realización de la 27ª edición de la Feria Internacional del Libro de Lima, un evento que convoca cada día a más de 40 mil visitantes. El docente y escritor maragato Pedro Peña estuvo entre los invitados por la Cámara Peruana del Libro, que organiza la enorme actividad.
La ocasión le permitió al escritor viajar por cuarta vez a la que considera su “segunda patria” por razones literarias y humanas que abordó en una charla que recorrió aspectos culturales, históricos, sociales y políticos sobre una nación que atraviesa un presente convulsionado como consecuencia del quiebre institucional, que derivó en la actual dictadura de Dina Boluarte, que era la primera Vicepresidenta del depuesto presidente Pedro Castillo.
INVITACIÓN | Para explicar en brevísima síntesis el motivo de su participación en la feria de Lima, Pedro Peña dijo que “en el año 2010 mi segundo libro, de los 12 que llevo publicados, se publicó en el Perú por Ediciones Altazor; aquel libro fue ‘La noche que no se repite’, que acá en San José fue publicado en el diario Primera Hora en aquel momento. Altazor es una editorial mediana y local en Perú; su director Willy del Pozo algunos años después fue Director de la Cámara Peruana del Libro”.
Peña añadió que “por cuestiones editoriales he estado tres veces en Perú, en total han sido cuatro, pero esta fue la tercera vez que viajé por cuestiones literarias y lo hice invitado por la cámara y quiero resaltar la importancia de esto porque la Cámara Peruana del Libro es enorme, con cientos de editoriales grandes, medianas y chicas y fue una muy linda oportunidad”.
PERÚ | La primera vez que Peña viajó a Perú fue en 2001 “por la Asociación Cristiana de Jóvenes integrando una brigada de apoyo de voluntarios internacionales en el contexto de un terremoto que hubo en el sur en Arequipa, Monquegua y Tacna, con 102 fallecidos, 70 desaparecidos, 17500 viviendas destruidas, 35500 afectadas. Ahí fue cuando conocí al Perú, luego fui por temas vinculados específicamente a los libros, en 2010, 2017 y ahora”.
Aunque las razones del primero y los últimos viajes al país incaico han sido bien diferentes, también lo fueron entre sí los que realizó ya como escritor. “En 2010 la Editorial Altazor organizó una gira de nueve escritores jóvenes latinoamericanos de distintas nacionalidades, hicimos una recorrida por más de 20 ciudades de Perú durante un mes presentando nuestros libros publicados por esa editorial”.
Contó que “fue una experiencia fantástica, incluso de supervivencia y aventura (se ríe), porque fue muy exigente desde el punto de vista físico, pero también muy conmovedora en cuanto a la convivencia y las amistades que pude generar y que se mantienen hasta hoy”.
Sobre su segundo viaje, Peña dijo que “en 2017 fui por menos días porque fui solamente a la Feria del Libro de Ayacucho o Huamanga que es una ciudad de unos 120 mil habitantes pero tiene la particularidad de tener 33 iglesias y recuerdo haber estado un domingo en una misa, no porque sea creyente sino porque me gusta cuando ando por ahí ver esas ceremonias y en aquella misa había dos cardenales y ocho obispos; es gente que vive la religiosidad de una manera muy particular”.
LIMA | Finalmente sobre su último y reciente viaje, el escritor dijo que “la Feria Internacional del Libro de Lima es un evento enorme, con unos 300 stands. Se estima que el número total de visitantes es de casi 750 mil personas que pagan entrada y eso es muchísimo para una feria del libro, en cualquier parte del mundo”.
Peña dijo que “a nivel latinoamericano está la Feria de Guadalajara, la de El Zócalo también en México, luego la de Buenos Aires y creo que la de Lima puede ser la siguiente en importancia”.
EXPOSICIONES | Pedro Peña tuvo a su cargo dos charlas en el marco de la feria. “Una fue sobre la novela negra el día 25 de julio y compartí con un youtuber y una instagramer que dieron su visión sobre este género desde los nuevos formatos de comunicación con llegada masiva a un público enorme en todo el mundo; ellos que difunden la novela negra o policial y yo como escritor logramos generar un lindo intercambio con el público”.
Al día siguiente “la segunda charla también fue muy interesante y fue sobre la saga del Libro de los Mitos y sobre la literatura infantil y juvenil con una escritora británica que se llama Alexandra Christo que es una autora de primer nivel mundial, de apenas 30 años”.
El escritor acotó que al regreso “yo vuelvo a convivir con mi trabajo que no es la escritura sino la docencia, pero esos autores han logrado vivir de la escritura, de los viajes y de la promoción de sus libros, por ejemplo luego nos encontramos con Christo en el hotel y me comentó que haría una recorrida por Lima con algunos fans que habían sido sorteados por su editorial”.
Peña aclaró que “eso es algo que no se lo envidio, porque deben ajustarse a un muy cuidadoso discurso para no ofender a nadie, es una obligación para la que siempre hay que estar bien y a tono y yo por suerte no padezco todo eso porque puedo expresarme con total libertad sobre mis ideas políticas o sociales, por ejemplo”.
Peña se refirió a que la mayoría de los escritores uruguayos viven de un trabajo distinto a la literatura. “Yo no conozco más de dos escritores que vivan de la escritura, de mi generación sólo uno, el resto o somos docentes, algunos son comerciantes, otros son periodistas, conozco a uno solo que lo único que hace es escribir todo el día para distintos medios con guiones de programas o de historietas y es mi amigo Rodolfo Santullo, que es el único que yo sé que vive sólo de lo que escribe, no olvidemos que Benedetti u Onetti pagaron por sus primeras ediciones y pasaron 30 años tal vez para que su obra se posicionara de una forma debida y poetas como Idea Vilariño o Ida Vitale debieron trabajar toda su vida como docentes”.
PREFERENCIAS | En cuanto a su percepción de los géneros que predominan en las preferencias del público, Peña dijo que “la novela policial en general o la novela negra que es un poco más específica o la novela de misterio, forman un género que viene en ascenso en las preferencias del público aunque académicamente carezca de prestigio”.
Agregó que “el otro género que también se sostiene es el de la fantasía infantil o juvenil, que lo puede leer gente de todas las edades, es la literatura más vinculada a mundos paralelos o mundos nuevos con criaturas; eso ayuda un poco a los jóvenes lectores a escapar de la realidad”.
A nivel nacional, Peña dijo que “también hay mucho interés por la novela histórica y acá en Uruguay tenemos buenos escritores, creo que los lectores van cambiando, hay cierto gusto por el morbo o el crimen y la realidad o los conflictos de las sociedades”.
El escritor percibió también “cierto interés por las obras sobre personajes históricos, una en particular que espero leer pronto es Las mujeres de Vallejo sobre la vida de César Vallejo el poeta emblemático del Perú y que es el libro del año en aquel país” y agregó que el que le sigue “es de Jaime Bayly ese periodista cubano radicado en Miami al que se le ama o se le odia por sus polémicas posturas. Él escribió un libro que se llama ‘Los Genios’ y en él hace algunas consideraciones sobre por qué se habrían peleado García Márquez y Vargas Llosa, son dos biografías con toques de ficción dados por el autor, que da su interpretación de las razones del conflicto entre los dos escritores famosos”.
PERSONAL | En cuanto a un próximo libro Peña dijo que “hace un par de años que estoy como atrapado con temas de estudios que espero terminar en algún momento y que tienen que ver con la formación docente” pero admitió que algo vendrá. “Estoy empezando una historia nueva que me interesa mucho realizar con ciertas restricciones y complejidades que me he autoimpuesto a la hora de la escritura sobre personajes de la cotidianeidad y del conflicto vinculados con el crimen, pero prefiero no adelantar mucho”.
Agregó que se trata de “una historia que me resulta un desafío hasta psicológico porque aunque siempre es un disfrute la escritura, a veces cuando vemos algunos temas que cada vez se potencian más en nuestra sociedad hay que tener cuidado para ver cómo se plantea el problema para llegar a la comprensión y no al juzgamiento”.
Explicó que busca evitar “ese lugar repudiable para un escritor que es el de la lección moral con los lectores, así que estoy en la tarea de comprender a los personajes, por qué trafican, por qué matan, por qué se dedican a lo que se dedican y me sorprendo cada vez que escribo algo sobre ellos, porque escribir es la mejor manera de aclararse lo que uno piensa sobre determinadas cosas”.
CRISIS | Por último sobre la situación social y política en Lima dijo que “es muy complicada, yo como extranjero en el país que me recibe debo guardar la prudencia, la feria estaba lejos de las protestas que se daban sobre todo en la Plaza Mayor de Lima”. Explicó que se ha mantenido al tanto de los acontecimientos “porque cuando surgió la posibilidad de que Pedro Castillo compitiera con Fujimori me pareció interesante, Castillo me resultaba una figura muy atrayente, por su humildad, por el lugar del que venía, porque era docente en una zona empobrecida luchando con muchísimas dificultades”.
Sin embargo “fui siguiendo su mandato con cierta preocupación porque si bien sus planteamientos me parecían correctos también desde afuera uno veía que algunas cosas no eran realistas porque si bien yo pienso como él desde la izquierda, no como militante sino como votante, pero sinceramente se le fue la moto con su intento de disolución del Congreso, lo que no quiere decir que el gobierno de Boluarte esté plenamente validado, la gente protesta porque quiere a alguien como Castillo que les gobierne porque cree que representa algo mejor que la élite que es una especie de nobleza oligárquica que ha gobernado históricamente y todo este conflicto que se vive en Perú es lo que impide que el país se desarrolle como se merece”. Recordó que “de los últimos seis o siete presidentes, cuatro están presos”.
Por Jorge Gambetta.
