En la edición anterior de La Semana anunciábamos el encuentro acordado entre la intendenta Ana Bentaberri y el director responsable de la comparsa “La que mueve Ciudad del Plata”, Germán “Chico” Hernández para analizar la problemática surgida a partir de las denuncias por ruidos molestos de la que fue objeto la comparsa para el pasado miércoles 1º de noviembre, pero el encuentro debió postergarse para el viernes 3 de noviembre debido a un pequeño quebranto de salud de la Intendente.
Ese viernes el encuentro se dio sobre horas del mediodía en la sede de la Intendencia. Como la nota gráfica que acompaña a estas líneas lo delata, fue un encuentro mano a mano entre Bentaberri y Hernández. No hubo declaraciones por parte de Bentaberri al culminar el encuentro, pero sí las hubo de parte de Germán Hernández, quien dijo que se retiraba “contento después del trago amargo vivido en la reunión en Ciudad del Plata”, hecho éste que generó los comunicados públicos ya difundidos por los responsables de la comparsa y publicados en la pasada edición.
“Ella se puso al tanto de lo que había pasado en la reunión y enseguida nos convocó, escuchó nuestro punto de vista porque se había armado un teléfono descompuesto”, dijo Germán Hernández, quién contó que él le explicó a Bentaberri cómo funciona la comparsa.
“Ella entendió y nos pidió que usemos un horario razonable y que manteniendo ese pedido y la convivencia, la higiene y el respeto, sigamos como venimos”, dijo respecto a la charla mantenida con Bentaberri.
INVITADA | La Intendente le confirmó a Hernández que no habrá sanciones ni multas, pero sí les pidió que se manejen dentro de las normas de convivencia mínimas, respetando horarios de descanso de los vecinos y manteniendo limpio el entorno que utilizan.
Germán “Chico” Hernández, invitó a la intendente Bentaberri a participar de un ensayo y llegar en forma sorpresiva para que ella misma lo viva y sienta, sin que nadie se lo cuente.
La Que Mueve Ciudad del Plata, volvió a ensayar el pasado domingo 5 y los chicos, pianos y repiques sonaron en sintonía con la convivencia y la participación, al compás de la cultura popular, que genera el ritmo del candombe.
Por Carlos García.
