El Municipio de Ciudad del Plata procedió a demoler las antiguas edificaciones ubicadas en el predio donde funcionaba la UTU, donde se instalará el futuro proyecto de Centro Cívico. Los trabajos en el predio ubicado en el kilómetro 27.500 de la ruta «vieja», se realizaron con maquinaria del Municipio para la planta baja y otra contratada para los trabajos en altura. Efectivos policiales intervinieron para retirar a personas que se encontraban en el interior de las estructuras que fueron demolidas.
El casco histórico del lugar, considerado como patrimonio histórico de la ciudad, se mantendrá y su recuperación edilicia será parte del proyecto del centro cívico. La obra será realizada por la Intendencia de San José, con apoyo del Programa de Desarrollo para Gobierno Subnacionales (PDGS) de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP). Para la elaboración del proyecto edilicio, la Intendencia firmó un convenio con la Corporación Nacional para el Desarrollo (CND), y el Municipio.
PREOCUPADO | La demolición del edificio trajo consigo la preocupación del Edil nacionalista Héctor Silvera, quien en el lugar reclamó públicamente medidas de seguridad laborales y ciudadanas, cuando se percató que los operarios y las autoridades presentes en el lugar, no llevaban ni cascos, ni chalecos de seguridad y que el perímetro no tenía las marcaciones por la ley reclamadas.
De parte del Municipio, quien estuvo a cargo de la demolición fue la alcalde Marianita Fonseca, quien dijo a La Semana que si bien es cierto que no se colocó cinta previamente, si una vez finalizada la operación de la maquinaria.
En cuanto al retiro de los escombros, Marianita Fonseca dijo que no ve conveniente la limpieza del predio porque se corre el riesgo de que se construya en forma precaria como ha acontecido otras veces en distintos puntos de la ciudad.
Sobre el lugar en que se construirá el futuro Centro Cívico de Ciudad del Plata, Marianita Fonseca contó que el torreón, que según testimonios con los que ella cuenta habría sido un farol en altura que se encontraba decorado por un vitraux de importante dimensiones, se mantendrá en pie y comienza el camino para ser declarado como patrimonio histórico de la ciudad. En este proceso se buscará que esté dentro de los diseños arquitectónicos, preservando así un trozo de historia montada en ladrillos.
Por Carlos García.