El pasado martes 27 de octubre se realizó la audiencia en la Dirección Nacional de Trabajo (DINATRA), a la que había convocado FUECYS (Federación Uruguaya de Empleados del Comercio y Servicios), por el cierre sin aviso previo y sin pagar los adeudos a sus empleados, de la empresa de seguridad y limpieza Reluce, que dejó a 200 personas –por lo menos unas 40 del sur de San José-, sin trabajo.
A la instancia del 27 se presentaron las empresas que contrataban a Reluce -entre ellas Joyson, Bonprole, Efice-, que tienen responsabilidad al tercerizar el trabajo y una de las propietarias de Reluce, que adujo ante los representantes del Ministerio y de los trabajadores que hacía tiempo que ella y su madre –quienes figuran como las propietarias-, estaban algo alejadas de la firma por problemas de salud y que ellas habrían sido estafadas también por otros empleados –nombró al contador y al jefe de operaciones de la firma-, que se habrían quedado con el dinero.
Según lo informado por María Cazard, una de las personas afectadas por el cierre de la firma, el diálogo quedó abierto pese a que no convenció lo informado por esta persona. “Este será un proceso que llevará mucho tiempo”, dijo Cazard, que informó que todos los afectados están concurriendo a las oficinas del MTSS para saber bien lo que cada uno debe para presentarlo a la empresa Reluce o a las que la contrataban, ya que la ley de tercerizaciones establece que ante la falta de pago de la tercerizada, es la que contrata la que debe pagarlos.