A dos años de su peor inundación, San José de Mayo sigue a la espera de una solución que garantice que lo sucedido en abril de 2016 no se repita. La Facultad de Ciencias hará un estudio sobre el comportamiento del río San José, tras firmar un convenio con la Intendencia de San José.
Desde el año 2016 en adelante se han manejado varias ideas con el objetivo de paliar las consecuencias que podrían volver a provocar futuras inundaciones en la capital departamental de San José, no obstante ninguna se ha puesto en macha hasta el presente.
Días atrás el intendente de San José, José Luis Falero, acordó firmar un convenio con la Facultad de Ciencias de la Universidad de la República (UDELAR). El acuerdo será el puntapié inicial para llevar a cabo investigaciones sobre el comportamiento del río San José. Conocer las características del afluente permitirá definir qué medidas posteriores debe tomar la comuna para revertir el efecto de las crecientes.
Los contactos con esa casa de estudio fueron hechos por el diputado del Partido Nacional, Ruben Bacigalupe en 2016. Durante 2017, el decano de la Facultad de Ciencias Juan Cristina ya había expresado su voluntad para trabajar en la búsqueda de soluciones a esta problemática.
“Esta noticia nos alegra muchísimo ya que ha sido una gestión que comenzamos a realizar a fines del 2016 y que comiencen a realizar el estudio es un gran paso para poder brindar a los que sufren las inundaciones, respuestas”, escribió Bacigalupe en su perfil de la red social Facebook.
En julio del año pasado el legislador blanco le entregó, además, un total de tres mil firmas al titular del Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP), Víctor Rossi. Las mismas fueron recolectadas entre los propios vecinos que residen en las zonas inundables de la ciudad, solicitando que se pusiera foco en buscar soluciones al problema.
En marzo del presente año, Rossi se comprometió a la posibilidad de llevar a cabo una limpieza del río para paliar la situación. Fue en el marco de una recorrida que hizo junto a los vecinos afectados y el edil nacionalista, Héctor Silvera.
Según dijo en la oportunidad el Secretario de Estado, la idea consiste en hacer una intervención sobre los montículos de arena y la vegetación, que podrían estar obstruyendo la circulación normal del agua. La obra podría ayudar a mejorar el recorrido de las corrientes y que no haya desbordes ante lluvias intensas. No obstante, el Ministro dijo que la medida no será una solución ante inundaciones importantes, “Las inundaciones grandes no se van a evitar”, dijo.
REALOJO | Víctor Rossi dijo en esa oportunidad que la solución definitiva y la que tiene un menor costo a largo plazo, sería el realojamiento de las familias afectadas. Sin embargo y por su parte, la ministra de Vivienda Eneida De León dijo que hay otras zonas del país que requieren soluciones con más urgencia.
Las declaraciones de De León fueron hechas en el marco de las audiencias previas al Consejo de Ministros que se llevaron a cabo el domingo 8 de abril en San José de Mayo, en las que estuvo acompañada por el director Nacional de Agua, ingeniero Eduardo Reif.
Si bien informaron que están trabajando en el tema, dijeron que eventos como el sucedido en el año 2016 son esporádicos en San José, por lo que la cartera decidió priorizar otros sitios del país.
En setiembre del 2017 la Ministra había transmitido su voluntad para efectuar el “realojo de las familias radicadas en las zonas más críticas”, siempre y cuando la Intendencia aportara el terreno y evitara que se formaran nuevos asentamientos en el área inundable. Fue tras una reunión que mantuvo con el diputado del Frente Amplio, Walter de León. Del encuentro también participaron autoridades de la Dirección Nacional de Vivienda y de la Dirección Nacional de Aguas.
No obstante, ahora el MVOTMA anunció que en lugar de eso la cartera se abocará al trabajo de prevención y alerta temprana de la población.
Cabe recordar que en octubre del 2017 un grupo de medio centenar de personas aproximadamente, se movilizó en el centro de San José de Mayo para protestar ante la falta de soluciones por parte de las autoridades competentes.
HISTÓRICA | La de 2016 fue la peor inundación que sufrió San José desde 1959. En la oportunidad, el agua sobrepasó el “Puente Carretero”, puente de ingreso a la ciudad, ubicado en la ruta 11, llegando el agua a zonas donde nunca antes lo había hecho. Los vecinos que residen en las áreas más afectadas perdieron prácticamente todas sus pertenencias y en muchos casos tuvieron tiempo de salir solamente con lo puesto.
La creciente afectó a 4500 personas y 11 barrios de la capital departamental, según el balance final efectuado en la oportunidad por el Comité de Emergencia, que debió asistir a más de 2500 personas, cuyas situaciones era de extrema pobreza y en estado de alta vulnerabilidad.
Por Katherine Martínez.
