Para los partidos que tienen definidas sus fórmulas presidenciales, las elecciones internas de los partidos son instancias en las que nada se dirime. Es por eso que sectores como la Unidad Popular-Frente de Trabajadores, ven el proceso como una oportunidad para comenzar a llegar con su mensaje. Gonzalo Martínez y Andrea Revuelta conforman el tándem que este nuevo grupo que conforman la Unidad Popular, el Partido de los Trabajadores (de origen trotskista), y otros sectores, presenta para la elección nacional de octubre y en la pasada semana, estuvieron de recorrida por el departamento de San José.
El candidato presidencial Gonzalo Martínez tiene 34 años y es el candidato más joven de esta próxima instancia electoral. Dijo a La Semana que el hecho que “nosotros seamos los integrantes de la fórmula se dio como una cuestión de vínculos y de posibilidades y no depende de nuestra forma de concebir la política o nuestra propuesta en sí, porque todo eso, en realidad está definido y acordado desde que se formó la alianza”.
“Podrían haber sido otros compañeros los que compusieran la fórmula y estarían diciendo -con su estilo-, lo mismo que nosotros, se referirían a las mismas iniciativas, harían un análisis de la realidad similar al nuestro. Eso es porque somos compañeros y compañeras que vamos detrás de una fórmula que representa a una concepción de izquierda”, añadió el dirigente de la UP.
Prosiguió diciendo que es cierto que su sector no tiene competencia interna, pero “las internas son un requisito de la Corte Electoral y nosotros transitamos esta etapa pensando en octubre; eso lo hacemos porque es nuestro desafío, es la gran dificultad que tienen las organizaciones pequeñas. Frente al avallasamiento y a la gran estructura electoral que tienen las otras coaliciones, tanto la progresista como la de la derecha, a nosotros se nos hace cuesta arriba enfrentarlo. De todos modos, contar con una buena votación en esta etapa, contribuye a ganar credibilidad y legitimidad en un sector de la gente que está dispuesto a votarnos, pero que aún nos está midiendo”.
VEGA Y SALLE | En la elección pasada la Unidad Popular quedó fuera del Parlamento, luego de cinco años de gestión como Diputado de Eduardo Rubio. Consultado sobre si realizaron un análisis de por qué ocurrió esto, dijo Gonzalo Martínez que “el resultado negativo se explica en parte por el buen trabajo que hicimos en el Parlamento”.
“Cuando impulsamos el Plan Nacional de Vivienda Popular, logramos el respaldo de miles de personas a lo largo y ancho del país. Se aprobó en la Cámara de Diputados y después el FA se vio obligado a matar el proyecto en Senadores, porque apuntaba a resolver el problema de la vivienda de una buena manera. También fuimos responsables de llevar adelante una Comisión Investigadora de la estafa en ASSE y el FONASA, que terminó con la remoción de directores de ASSE por eso; presentamos 17 proyectos sobre distintas áreas, presentamos cientos de pedidos de informes. Fuimos una bancada que afectó muchos intereses políticos y eso no satisfacía”, dijo Martínez.
Es por eso que entiende que se “generó toda una infraestructura alrededor nuestro, surgieron partidos minoritarios a los que se les brindó mucha prensa; tuvimos que enfrentarnos a quienes ostentaban la mayoría en ese momento y también a quienes pretendían quedarse con el gobierno. En ninguno de los bandos la conducta de la UP era conveniente. Hubo un gran esfuerzo para limitar nuestra incidencia”. Martínez recordó que sólo le faltaron dos mil votos para ganar la banca.
Respecto al PERI de César Vega y el Partido Verde-Animalista de Gustavo Salle, sus competidores en materia de propuestas ambientalistas, dijo Gonzalo Martínez que “la realidad es que la visibilidad y todos los medios de comunicación se centraron en dos personajes, el de Vega y el de Salle. Uno porque gritaba y andaba con un enano dentro de un cajón y el otro porque andaba regalando lechugas y acelgas a la gente. Esa es una oferta en el escenario político que para algunos será satisfactoria y para otros no, la realidad es que en el transcurso de la actuación política Vega terminó respaldando al actual gobierno y Salle se ha dedicado a su actividad política, pero sin gravitar en serio en las luchas populares”.
PROPUESTAS | En lo que tiene que ver con propuestas programáticas, Martínez dijo que la UP-FT, quiere “llevar adelante medidas que generen transformaciones de fondo en las condiciones sociales de los más humildes. Para transformar eso hay que darle un fuerte impulso a la industria nacional”.
“Nosotros estamos de acuerdo con la inversión extranjera en la medida que cumplan con todos los derechos laborales y cuiden los recursos naturales y no contaminen, pero al mismo tiempo es necesaria la industria nacional y para eso el Estado debe volcar recursos para impulsar las industrias”, agregó.
Luego dijo que “la producción de alimentos es un elemento clave para generar el cambio que pretendemos y para eso hay que ponerle freno al modelo sojero-forestal”. En materia del sector financiero, promueve la UP-FT, volver a poner impuesto a la actividad bancaria, de donde se pueden generar recursos y poner impuestos a zonas francas, además de plantar la suspensión del pago de la deuda externa, analizarla y utilizar esos recursos para las necesidades de la gente, sobre todo de los sectores más humildes.
¿ACUERDOS? | Consultado en concreto sobre si hay posibilidad de algún acercamiento con el Frente Amplio, dijo Gonzalo Martínez que “dentro del FA existen muchísimos militantes de izquierda y honestamente pelean todos los días para que en Uruguay haya un cambio; incluso similar al nuestro”.
Pero “la realidad es que la conducción que hoy lleva adelante el FA nos aleja de forma sustancial, por eso tenemos este espacio alternativo como una opción de izquierda. Hay temas en los que el FA se ha colocado en el centro y muchas veces a la derecha, por ejemplo el FA no pudo resolver el tema de las AFAP’s; de hecho mientras gobernó las mantuvo y les dio mayores beneficios. Hoy frente a la propuesta del plebiscito, quedó dividido, los principales dirigentes están apoyando la reforma del gobierno”, dijo Martínez, quien entiende que es difícil llegar a acuerdos con la coalición de izquierdas, aunque ellos no la consideran como tal y sólo la denominan progresista.
Por Javier Perdomo.
