Para el Día Internacional de la Mujer, hacemos algunas reflexiones que conducen a profundizar en historias que, a pesar de la ficción, puede parecerse a la realidad de muchas mujeres que luchan por encontrar su lugar, ese que nunca debieron perder. Así, en ese camino por recuperarlo, el compromiso y la adhesión a sus justos y necesarios reclamos, son los principios movilizadores. En esta oportunidad, la invitada es una mujer española que ofrece a través de sus trabajos, una lectura no sólo entretenida, sino que con ella, busca adentrarse en la vida de las mujeres.
Al igual que toda lectura profunda, permite transitar otros caminos, otras vivencias que, bien pueden asemejarse a la vida de cualquiera de ellas. Uno de sus trabajos, “Nada te turbe”, intenta ofrecer otra perspectiva de las transformaciones que puede vivenciar cada mujer, en ciertas etapas de su vida.
Nada te turbe (2002), fue escrita por la española Susana Pérez Alonso, que tiene entre sus trabajos destacados, Cuentos de hombres (1999), Mandarina (2000), Nunca miras mis manos (2003), De la ternura, la impostura y el sexo (2004), En mi soledad estoy (2005), La vida es corta pero ancha (2005), La fuerza de tu abrazo (2006), entre otros.
CONVICCIONES | Nacida en Asturias, España, más precisamente en el pueblo de Turón, Susana Pérez Alonso proviene de una familia de clase media. Biznieta de judíos centroeuropeos que construyeron fábricas de vidrio en Asturias y que llegaron a esa tierra huyendo de la violencia. Su padre era hijo de un militar republicano y parte de su familia vive en Francia, nunca regresaron del exilio. Estudió Derecho y Filosofía y se graduó en Relaciones Laborales, ejerciendo por varios años como Procuradora.
Fue una de los integrantes de la Comisión de la Memoria Histórica de la ciudad de Oviedo, encargada de inventariar los símbolos de la dictadura franquista en dicha ciudad y se le concedió la Medalla de Bronce de Oviedo. Militante del PSOE fue sancionada por criticar la falta de libertad de expresión en su partido y por denunciar que en la actualidad, la democracia no deja de ser una especie de ópera bufa y opinar que quien dirige los destinos del mundo son las multinacionales que suplantan el poder de los gobiernos.
Susana Pérez Alonso, para la que no existe el gri, se identifica como socialdemócrata y militante, antinacionalista y luchadora infatigable contra la especulación urbanística, las nucleares, el poder de la industria farmacéutica, la armamentística. La mitad del año vive en el campo, donde dedica su tiempo a hacer mermeladas y licores y por supuesto a escribir.
Colaboradora de diferentes medios de comunicación, muchos de sus trabajos los perdió por negarse a cambiar sus artículos o por no querer variar opiniones. Expone sus ideas y trabajos desde las redes sociales, aunque cree que “no tardará mucho en que la red perderá su libertad”.
VIDA Y OBRA | Ferviente lectora desde muy niña, al contrario de otros escritores, la escritura no fue prioridad durante buena parte de su vida, que estuvo dedicada a trabajos en estudios notariales y tribunales.
Llegado un momento en el cual su salud le jugó una mala pasada, decidió dar un vuelco a su vida, un cambio radical, dedicándose a su carrera literaria, en la cual dice ser feliz. Pérez Alonso dice que para escribir se guía por la intuición y nunca sabe cómo va a terminar una de sus obras.
“Yo aprendo de los libros, evidentemente, pero aprendo mucho más de los sentimientos y de lo que veo. La inteligencia emocional es lo mío. Si una cosa no me sorprende, no me interesa. Por ejemplo, dejé de estudiar porque no me interesaba lo que me estaban explicando”, comenta.
En el Libro “Nada te turbe”, Susana Pérez Alonso pone énfasis en la postura de la mujer frente a distintas situaciones que debe enfrentar en la vida, reivindicando mucho de lo que la mujer debe potenciar. En sus trabajos y en este en particular, propone una historia acerca de la autoestima, la feminidad, el amor, la felicidad, la valentía de querer cambiar. Quizá lo más interesante del texto, sea el matiz específico que le sabe dar a sus enfoques, donde el sentido del humor permite la posibilidad de desdramatizar situaciones cotidianas que viven las mujeres.
“Nada te turbe”, tiene como protagonista a Catalina Béjar del Prado, una mujer progresista hasta donde le conviene. Como síntesis, el trabajo muestra a una mujer que se casó con un igual, o por lo menos así lo creía ella. En el fondo se casó para escapar, aunque nunca supo de qué. Ahora, en la cuarentena, Catalina se siente permanentemente turbada. El problema es su casa, su hija, su marido, su trabajo, su madre, su hermana, su amante, la mujer de su amante, la política, la globalización, la anorexia, los gimnasios… Catalina Béjar del Prado es una mujer maravillosamente anormal en un mundo reglado, demasiado sumiso para la fiera que esta burguesa lleva dentro.
Y un día, Catalina decide seguir el consejo de su hija: recuperar el tiempo perdido, rebelarse, como tenía que haber hecho hace mucho tiempo, contra quienes parecen saber siempre lo que tiene que hacer. Contra los que le han hecho creer una serie de consignas vacías, en aras de una supuesta liberación femenina. Catalina se embarca entonces en la aventura de su vida: conocerse a sí misma. A través de sus páginas, el libro muestra ese periplo por el que tantas mujeres pasan, en su propia búsqueda interna.
MANDARINA | Otro de sus trabajos es Mandarina, el cual la escritora considera una de sus mejores obras desde el punto de vista literario. “Es lo mejor que he escrito sin embargo, posiblemente sea la más difícil de leer para gente que no está habituada a una historia de amor desde el punto de vista del sexo…No lo hago ni como una provocación ni como un reto. Ahora bien, una vez escrito, reconozco que sí es muy difícil escribir una novela así sin caer en la ordinariez, en la vulgaridad, porque te mueves en un léxico muy limitado y las palabras son las que son”.
Explica que su libro Mandarina, intenta mostrar algunas pautas con respecto al sexo con las cuales no concuerda. “Yo uno el sexo y el amor de una manera que no se puede desvincular.. Yo creo que se le da demasiada importancia al sexo últimamente, y muy poca al sentimiento. Y se intenta desvincular una cosa de la otra, como si fuese una moda”, cree.
Respecto a su opinión de la mujer en el presente, la escritora comenta que es la propia mujer que adopta muchas veces roles machistas “creo que la mujer siente de una manera diferente al hombre, pero lo que está haciendo es copiar roles de macho. Y yo no quiero ser una macho, porque además hay otra cosa y es que un porcentaje muy grande de individuos piensan con la entrepierna, y yo no quiero ir atrás en la escala de la evolución… las mujeres estamos más evolucionadas”.
Cree que la mujer ha tenido que adaptarse a cambios muy radicales que le han provocado daño. “Yo creo que la mujer está un poco confundida, a causa de la represión que tuvimos antes y con la apertura que tenemos ahora, que coincide con la globalización tremenda y asquerosa que nos invade. Hay mujeres a las que le da vergüenza mostrarse como son, porque en el momento en que te muestras como eres, da la sensación de que el hombre lo toma como una debilidad”, dice.
Cuando se le pregunta qué es lo que más le fastidia de los hombres, dice la escritora que
“el hombre debe entender que la mujer siente diferente y que no hay que engañarla, porque es real y literal, que hay muchas mujeres que se pueden morir por amor, aún hoy”.
Con respecto a la vida, tiene sus directrices muy claras, lo que cree es fundamental para estar en el mundo: “vivir sin compromiso no merece la pena. Me siento comprometida con la verdad, con la justicia, con el poder decir lo que quiera, contra la tiranía. Yo creo que contra eso, hay que estar comprometido siempre”, dice Pérez Alonso.
Imagen tomada de la web.
Por Yudith Píriz.