En el Club de Abuelos Libertad la situación es similar a lo que ocurre en la Asociación de Jubilados y Pensionistas (AJUPEN). Según su presidente Alberto Cantisani, el club hace prácticamente un año que está cerrado, ya que no pueden organizar ningún tipo de actividad.
Comentó Cantisani que “el año pasado, cuando pareció que la pandemia no ingresaba al país, se le solicitó a la Dirección Departamental de Salud si podíamos ir por lo menos a jugar a las cartas y se nos dijo que sí, pero después comenzaron a surgir muchos casos en Libertad y nosotros mismos decidimos cerrar todo, porque quienes asisten al club son todos de la edad de riesgo”.
Respecto a cómo se están solventando los gastos fijos de su sede de la calle Agraciada, dijo que es gracias al aporte de los socios, ya que no tienen otros ingresos. “Por ahora la mayoría de los socios colaboran, pero no sabemos, quizás mañana se pueden borrar, porque no les estamos brindando nada. Pagan su cuota por colaborar”, comentó Cantisani.
Javier Perdomo.