Como históricamente ocurrió en Uruguay -y pese a que hay tendencia a un cambio a partir de la planificación a largo plazo-, los servicios públicos llegan mucho después que la necesidad nace. Eso ocurre en todos los planos, pero hay una zona del barrio Progreso -el llamado Progreso Nuevo, calles Colón, 18 de Julio y Puntas de Flores hacia el este-, que está a la espera de un servicio esencial como es el saneamiento, hace casi 20 años.
Una insólita denuncia y un también insólito accionar del funcionariado de la ISJ, llevaron a que los vecinos de esa zona, se sacudieran la modorra y volvieran a reunirse y presionar por la construcción del saneamiento.
Es que hace unos 15 días atrás, varios vecinos recibieron notificaciones de la Dirección de Higiene de la Intendencia, por vertidos de agua en la calle, a partir de la denuncia de otro vecino. La reacción de los vecinos, fue preguntarse dónde quieren que se tire el agua si no construyen el saneamiento.
Así fue que convocaron a una reunión de vecinos el pasado sábado 10 de marzo, a la que también invitaron al concejal Gonzalo Rodríguez, al edil Carlos “Cardacho” Rodríguez y al alcalde Sergio Valverde, quien no pudo asistir por estar en otra actividad, en donde se analizó la problemática. Días después, hubo otro encuentro con representantes de las cooperativas de vivienda que esperan que el saneamiento llegue a ese barrio (zona de la ex cancha de Progreso, hoy terreno baldío), para poder construir y el director de Descentralización de la ISJ Sebastián Ferrero y alcalde Valverde en la que se analizó la situación.
Mauro Silva, uno de los vecinos notificados por la Intendencia, comentó que al hablar con Higiene “nos dijeron que hagamos conexiones de forma que todas las aguas las tiremos a nuestros pozos negro, pero eso es inviable porque tenés que llamar a la barométrica día por medio”.
“Cada vecino tendría que hacerse cargo de su agua, fue lo que nos dijeron y manejaron también que la Intendencia tiene una barométrica y que la podrían enviar para aliviar los costos, pero puede venir una vez y después no venir más porque se necesita en otro lado”, dijo Mauro Silva.
CON FERRERO | El vecino también contó a La Semana los detalles de la reunión que mantuvieran con las cooperativas y Ferrero. “Nosotros fuimos en representación del barrio, a escuchar. Según lo que informó Ferrero en esa reunión, OSE le exigió a la Intendencia que para que se pudiera hacer el saneamiento se tenían que hacer unas modificaciones en el entubado de las pluviales de todo el barrio. Después le exigía que dibujara los planos, todo eso ya lo hizo, se envió a OSE informando de los cambios realizados, pero hubo un problema interno por el que todavía no le había llegado al responsable del área ese oficio”.
Dijo luego Silva que acordaron que “se iba a dar un plazo de espera para que no haya ninguna objeción técnica y que luego se realizaría una reunión entre el intendente Falero y el Directorio de OSE y a partir de ahí se definiría la obra”.
Explicó el vecino que sería una obra “tripartita” en la cual OSE pondría los materiales, la Intendencia la maquinaria para realizar los trabajos y los vecinos se harían cargo de pagar por el trabajo.
Como grupo de vecinos, dijo Mauro Silva, “lo único que podemos hacer nosotros es pinchar” porque “estamos cansados de tener el ‘agüita’ en el cordón de la vereda”. Informó el vecino que son unas tres manzanas en las que debería construirse el saneamiento.
Recordó Mauro Silva que desde el año 2000 un vecino inició una campaña procurando que se construyera el saneamiento en esa zona y luego, hace unos cinco años atrás, también hubo otra movilización pidiendo la obra, pero hasta ahora no se ha logrado. “Ahora hay un montón de vecinos nuevos acá”, dijo Silva y añadió que “de OSE no hemos escuchado a ninguna autoridad que nos dé explicaciones, todo lo que tenemos son rumores”.
En cuanto a las acciones futuras, dijo el vecino que ahora están esperando que culmine ese plazo acordado con Ferrero en la reunión de días atrás, pero “pasado ese plazo, si no hay una respuesta, ningún avance, vamos a volver a juntarnos y tenemos pensado contactarnos con las cooperativas y vecinos de la Urbanización El Bosque, más un grupo de familias ubicadas sobre calle Municipio que también están pidiendo saneamiento; nos juntaremos, uniremos esfuerzos e iremos a golpear las puertas a OSE y vamos a presionar”.
RODRÍGUEZ | Paralelamente a estos movimientos de los vecinos, el concejal Gonzalo Rodríguez presentó un documento ante la Intendencia pidiendo que se contemple la situación de este grupo de vecinos. “Lo que plantean los vecinos es que no tienen ningún inconveniente, si existiera saneamiento, conectarse a él, porque ellos tienen pozos negros y una vez por mes va la barométrica, pero conectar el lavarropas al pozo negro implica un costo que no están en condiciones de hacerlo”, comentó Rodríguez, que contó además que percibió a los vecinos del Progreso Nuevo, “enojados por el procedimiento que realizó la Intendencia.
“En la nota que le presenté al Intendente planteo que el problema que hay en este barrio es una realidad que se extiende a varios barrios, aunque en algunos de ellos sí hay saneamiento e igual hay gente que tira a la calle. Ahí debe ser distinto el procedimiento porque hay saneamiento y es obligatorio ayudar a que la casa se una al saneamiento por un tema de higiene ambiental y de salud”, pero en el caso de Progreso Nuevo “propongo suspender estas intimaciones durante un año, hacer un relevamiento de las casa que no pueden aumentar la erogación económica que significa la barométrica y hasta tanto no haya saneamiento, poner a disposición de los vecinos la barométrica oficial una vez por mes”.
El crecimiento de Libertad es vertiginoso, es una localidad que no ha parado de crecer en los últimos 20 años y uno de los problemas más grandes que hay hoy, es la necesidad de más piletas de decantación para que desemboquen las aguas servidas, pero eso es algo que no está en los planes de OSE, por lo menos en el futuro cercano. Como siempre, los servicios llegan mucho más tarde que las necesidades de la gente.
Por Javier Perdomo.
