La oratoria en la actividad realizada en la plaza Artigas de Rafael Perazza, la comenzó en nombre de “Los Tucu-tucu” Cristina Dolio, quien leyó una declaración donde el grupo dice ser “la voz de Arazatí”.
“Desde hace dos años estamos en lucha por liberar Arazatí, porque lo conocimos libre, porque siempre fue libre, porque lo sabemos libre, no podemos concebirlo de otra manera. Y por eso, porque lo soñamos recuperando su libertad, la propia comuna convocó a una mesa de trabajo con diferentes actores, que tienen la misión de realizar el proyecto de Arazatí natural y ese proyecto debe tenernos contemplados a todos, a los pescadores artesanales locales, a los vecinos más cercanos al balneario, a los usuarios de todo el país y al resto del mundo”.
De forma natural “lo contempló Juan Díaz de Solís y lo nombró Arazatí; llegaron a sus costas barcos negreros cargados de esclavos y se guarecieron miles de aborígenes, las nuevas generaciones tienen derecho a disfrutar de ese mismo espacio agreste y natural, cargado de paz y naturaleza”.
“Solo se necesita voluntad, voluntad de coordinar las diferentes dependencias del Estado y articular un cambio que demuestre el respeto a los usuarios que allí disfrutamos con respeto al propio medio ambiente, que no es propio. No fue propiedad de las antiguas generaciones ni es de las actuales, ni será de las que vengan”, leyó Dolio.
“La Constitución de la República tiene leyes que amparan los espacios públicos naturales y este año, que pensamos que se podían comenzar a visualizar nuestros aportes, se comienza a hablar del proyecto Neptuno, un proyecto que nos ha llenado de dudas y certezas, porque tenemos claro que de ser realizado, Arazatí quedará sepultado en el lodo de los desechos de la planta, porque son muy poco claras las disertaciones que se dan”, culminó diciendo.
Por Javier Perdomo.