Desde la noche del lunes, el Destacamento de Bomberos de Libertad está sin su camión bomba a partir de una decisión de la Dirección Nacional de Bomberos, que definió su traslado hacia la localidad de San Ramón en el departamento de Canelones, para a su vez trasladar la bomba de esa localidad hacia Montevideo, tras la rotura de la perteneciente al destacamento de Casavalle.
«Estamos regalados», comentó una fuente que dialogó con La Semana sobre esta situación compleja que se vive este martes en Libertad. Las autoridades nacionales de Bomberos determinaron un intrincado movimiento de vehículos que llevó a que en Libertad desde hoy se cuente únicamente con una camioneta que fue traída desde San José de Mayo y que tiene un tanque de tan solo 400 litros de agua. El tanque de la autobomba que fue trasladada hacia San Ramón, almacena 1800 litros de agua.
“Esa no es una camioneta en la que los bomberos puedan trabajar”, dijo la fuente que dialogó con La Semana sobre la compleja situación que está viviendo el destacamento libertense y que prefirió mantenerse en el anonimato. Esa camioneta, agregó, apenas si puede llevar tres trabajadores (con la autobomba se lleva hasta cinco), y la mitad de los materiales necesarios para bien combatir un incendio.
La fuente que habló con La Semana dijo que la situación es de tal grado de complejidad que cualquier siniestro que ocurra en la zona no podrá ser bien asistido correctamente, ya que el agua dará como mucho para cinco minutos de trabajo y para que llegue el apoyo de la camión de Ciudad del Plata se necesitan cerca de 40 minutos; en ese tiempo, no queda nada si hay un incendio, mencionó la persona que habló con este medio9.
La fuente que dialogó con La Semana pidió que la sociedad civil de Libertad presione para que la autombomba sea devuelta, porque en otras localidades ha ocurrido que se las llevan y nunca más vuelven.
En pleno verano, la jurisdicción que atiende el destacamento de Libertad -con grandes extensiones de campo, empresas que usan materiales peligrosos y balnearios que exigen especial atención-, está prácticamente indefensa.
Imagen de archivo: La Semana.
Por Javier Perdomo.
