Informe: cerramiento y climatización de la piscina, 11 años de una espera en que las responsabilidades son compartidas

En nuestra pasada edición, informábamos que la visita a la Plaza de Deportes de Libertad, de las nuevas autoridades de la Secretaría Nacional de Deportes, encabezada por su titular, el ex presidente de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF), Sebastián Bauzá para anunciar formalmente el llamado a licitación para comenzar la construcción de las nuevas duchas, nuevos vestuarios y mejora del viejo edificio del centro deportivo libertense, obra ésta que se realizará con los seis millones de pesos que aportara en 2009 el entonces Ministerio de Turismo, Deportes y Juventud (MTDyJ), para el cerramiento y climatización de la piscina.

El mismo día que se cumplía la visita de Bauzá, junto al director de Deporte Comunitario José Luis Bringa, el intendente de San José Pedro Bidegain y varios referentes del Partido Nacional, el comando de campaña de la frenteamplista María Noel Battaglino, difundía un comunicado de prensa en el que expresaba su “preocupación ante el manejo que ha tenido el Gobierno Departamental de San José en relación a la situación de la piscina en Libertad. Entendemos que no se ha dado el compromiso que los y las libertenses merecen, producto de la desidia y de la mala gestión” y en él historiaba los distintos momentos que ha tenido la historia de la piscina cerrada que no se termina de concretar nunca.

Como esta historia ha tenido a La Semana como principal protagonista es que haremos un repaso de los principales momentos que tuvo esta historia, que comenzó en 2009, cuando en febrero de ese año, la entonces Dirección de Promoción Deportiva y Coordinación Institucional del MTDyJ, depositó dos cheques por seis millones de pesos para que fuera la Intendencia de San José la que realizara el proceso de construcción. Aquellos seis millones de pesos, eran suficientes para realizar la obra y tener una piscina cerrada modelo, tal y como en esos años se construyeron en varios departamentos del país y también en Montevideo.

CHIRUCHI | Pero en San José, las mezquindades políticas pudieron más que las aspiraciones de la gente. En 2009, año electoral, existía en Libertad una Mesa de Convivencia y Seguridad Ciudadana, que en una de sus reuniones recibió al entonces director de Promoción Deportiva Ernesto Irurueta y al secretario General de la Intendencia José Luis Falero, oportunidad en que Irurueta anunciaba que dentro de las políticas de promoción del deporte, el primer gobierno de Tabaré Váquez había aportado el mencionado dinero (240 mil dólares de la época), con el objetivo de cerrar y climatizar la piscina de Libertad.

En la oportunidad Falero no desmintió a Irurueta, pero quien sí lo hizo fue el intendente Juan Chiruchi, que en los días posteriores a la reunión realizada en Libertad (abril de 2009), negó que el MTDyJ hubiera hecho el depósito. Este medio de inmediato se comunicó con Irurueta para volver a consultarle al respecto y este medio obtuvo una copia digital del cheque por los seis millones de pesos que se había hecho a la IMSJ, lo que llevó a que Chiruchi no pudiera ocultar más el aporte recibido.

De allí en más se vieron las verdaderas razones por las cuales la Intendencia no quería reconocer el aporte y tenía que ver con que sería la comuna la que tendría que absorber parte del costo de mantenimiento de la piscina una vez que esta estuviera climatizada.

Luego vino todo el proceso electoral y la piscina quedó en nada, pese a que se realizó un llamado. En febrero de 2010, a un año de haberse realizado el aporte –y previo a las elecciones departamentales-, se realizó un encuentro en la propia Plaza de Deportes en que se informó que si bien se había realizado un llamado a licitación el dinero aportado ya empezaba a no alcanzar y la Intendencia debía poner, en caso de adjudicarse la obra, dinero para la climatización.

NUEVAS ADMINISTRACIONES | Pasadas las elecciones departamentales, el entonces nuevo Intendente josefino, José Luis Falero y las autoridades del MTDyJ encabezadas por Héctor Lescano, dijeron que iban a hacer borrón y cuenta nueva e iban a concretar la tan ansiada y a esa altura muy reclamada obra.

Incluso comenzaron a trabajar ambos organismos en la confección de un proyecto edilicio, que fue presentado con bombos y platillos en la sede del nuevo Municipio de Libertad, pero finalmente tampoco ese nuevo proyecto (que ya llegaba a costar 35 millones de pesos), fue realidad.

Según la información que se le brindara a María Noel Battaglino en un pedido de informes realizado en este año, se establece que en 2013 se realizó el llamado a licitación, que finalmente quedó desierta” porque las firmas que se presentaron, no cumplían con los requisitos” y “ni siquiera pasaron a la apertura”.

En 2014, siguiendo la información que manejó Battaglino, se volvió a realizar un nuevo llamado a licitación “para la construcción de local cerrado, vestuarios, baños, anexos y acondicionamiento térmico de la piscina”, que “no sé concretó por precios inconvenientes”.  A esa altura se llegaba a los cinco años sin avances.

Pero 2014 era año electoral y todos buscaban sumar para su lado. En la campaña hacia el ballotage que ganó Tabaré Vázquez, éste en un acto de cierre de campaña en Ciudad del Plata, anunciaba que en su segundo gobierno se iba a concretar la obra de Libertad ya que el dinero iba a estar en el Presupuesto Nacional para el quinquenio.

Pero al arranque de su segundo mandato, la situación económica del país comenzó a verse enlentecida y muchas de las cosas prometidas debieron quedar a un lado, entre ellas, la postergada obra en Libertad, que no fue incluida entre las prioridades del presupuesto.

VÁZQUEZ | De allí en más continuó el pedido de la comunidad y el recién asumido concejal Gonzalo Rodríguez, logró generar contactos con el director de Deporte Comunitario Miguel Blasco de la novel Secretaría Nacional de Deportes (dependiente ahora de Presidencia de la República), que le planteó la conformación de una Comisión de Apoyo a la Plaza de Deportes, como forma de trabajar con el objetivo de la obra.

Quedó claro desde ese momento que la plata no iba a estar para el proyecto total, por lo cual Blasco propuso llegar a un proyecto por el cual se invirtieran los famosos seis millones de pesos. Fue a fines de 2016 que a impulso de Blasco se conformara la actual Comisión de Apoyo a la Plaza de Deportes, tras una reunión en el Club Social El Asador, en la cual además se anunció que la profesora Cristina Méndez sería la nueva Directora de la Plaza de Deportes.

La llegada de Méndez fue más que positiva para la Plaza de Deportes, que logró una renovación más que bien vista por toda la comunidad, pero la inversión del dinero siguió sin darse. Proyecto va, proyecto viene; detalles más, detalles menos, la burocracia enlenteció hasta lo inaudito la inversión del dinero, que en la medida que pasaba –pasa-, el dinero se va desvalorizando y hoy no alcanza ni siquiera para los iniciales planes de ampliación de mejoras de duchas y vestuarios. Lo anunciado por Bauzá es lo que hoy se puede hacer con aquella plata y si se demora la construcción, habrá alguien que deberá poner la diferencia.

Hoy, a más de 11 años de aquel aporte, el avance ha sido mínimo. Lo que ahora se hará está lejos de lo prometido en 2009 y si uno se guía por las declaraciones que realizara el titular de la Secretaría Nacional de Deportes (SND), en la visita de la pasada semana, no hay que hacerse muchas esperanzas, respecto a que el cerramiento y la climatización se concrete en este quinquenio, aunque claro está que no hay que perder nunca las esperanzas.

Por Javier Perdomo.