Tras la declaración de la emergencia sanitaria por la aparición del COVID-19, todos los gimnasios y academias deportivas cerraron preventivamente sus puertas, algunos centros tuvieron cierta actividad virtual con clases mediante videos a través de las redes sociales.
En la jornada de este lunes, algunos locales comenzaron a recibir a sus alumnos y usuarios. La Semana consultó a varios de los responsables de esos lugares para conocer en qué condiciones irán restableciendo sus servicios a la población.
ATP | Bruno Vázquez, responsable de ATP GYM comentó que en su local ya “abrimos hace unos días. Se logró un protocolo consensuado y a último momento, no sabemos por qué razón, hubo alguna marcha atrás con el protocolo, pero ya la situación era muy difícil de mantener, porque las obligaciones siguen corriendo y nadie nos descuenta nada. Esto ocurre en todo el país, yo integro un grupo que abarca unos 70 gimnasios y academias en todo el Uruguay y hemos trabajado conjuntamente con el MSP” (Ministerio de Salud Pública).
Sobre la reapertura de su local Vázquez agregó que “hemos implementado la mayor cantidad posible de medidas de seguridad, alfombra sanitaria en la entrada; se toma la temperatura a la entrada, el uso obligatorio de tapaboca, cada persona tiene un difusor con el bactericida para desinfectar cualquier material antes y después de su utilización”.
Además el instructor dijo que “también bajamos la cantidad de usuarios por hora a un máximo de siete, además hicimos la demarcación de espacios para mantener el distanciamiento con áreas individuales de 2.25 x 2.25mts., las clases durarán 45 minutos, se ventilará el local y se realizará una desinfección de todo el local, incluidos baños y vestuarios tres veces al día”.
PRO FIT | Por su parte Bruno Lecchini, responsable de PRO FIT dijo que “nosotros cerramos a partir de la exhortación del gobierno. A partir de allí hicimos clases por Zoom con algunos grupos o se les mandaban determinados entrenamientos, ahora el retorno se hará en base a un protocolo diseñado a nivel nacional, respetando pautas y normas de seguridad para evitar la propagación del COVID”.
Lecchini agregó que “tendremos una bandeja sanitizante a la entrada del salón, se tomará la temperatura con termómetro infrarrojo, tendremos dispensadores de alcohol, espacios delimitados, trabajaremos con 10 personas por hora, las clases se armarán para que cada persona tenga en su espacio los materiales que utilizará”.
Asimismo cada usuario deberá firmar una declaración jurada respecto a su estado físico “dando garantías de que no ha tenido contacto con personas infectadas ni síntomas de riesgo, tampoco trabajaremos con la población de riesgo para quienes mantendremos actividades a distancia”.
Lecchini expresó que “el gimnasio va a trabajar casi en su máxima capacidad a pesar que algunos socios han manifestado que en principio desean seguir trabajando en sus casas”.
MOVING | A su vez Maite Arguinarena, responsable de la academia Moving dijo que en estos casi dos meses “hemos realizado clases por Zoom así como también hicimos algunos ‘vivos’ por Facebook e Instagram, pero la gente que se engancha en esas modalidades no es la misma, pero al menos pudimos mantener la motivación”.
Arguinarena dijo que “las niñas mantendrán la atención vía Zoom. El lunes abriremos solamente para jóvenes y adultas, con los niños esperaremos al menos hasta que se retomen las clases, al mismo tiempo tenemos que ir viendo cómo funciona todo”.
Asimismo también comenzaba ayer el funcionamiento de Espacio Salud, que dirige Luciano “Laucha” Acosta, compañero de Maite. Arguinarena comentó que “en la sala se trabajará con capacidad limitada dentro de los horarios, la gente tendrá que agendarse previamente ya que cada horario tendrá un cupo limitado”.
Tanto en la academia como en el Espacio Salud se dispondrá de la bandeja sanitaria a la entrada “y yo recomiendo a mis alumnas que traigan otro calzado y se cambien y tengan un calzado para uso exclusivo en el salón. El tapaboca será de uso obligatorio en la circulación dentro del gimnasio, se lo podrán quitar cuando comiencen su actividad física, porque durante la actividad en sí puede resultar incluso perjudicial porque se está respirando el dióxido de carbono que se exhala”.
Respecto al distanciamiento Maite Arguinarena dijo que el salón estará dividido “en cuadrados de dos por dos metros, tendremos una circulación permanente de aire, cada persona llevará su botella de agua; esa es una costumbre que ya instalamos el año pasado para evitar la contaminación con los vasos descartables”.
Respecto al control de temperatura la instructora dijo que “esperaré hasta que se oficialice el protocolo, apelo a la responsabilidad individual y no creo que alguien que se sienta afiebrado vaya a una clase de gimnasia, cada persona firmará una declaración jurada al respecto. Apostamos más a la desinfección del local y materiales, cada persona además tendrá que llevar una toalla grande para usar sobre las colchonetas, que serán desinfectadas antes y después del uso pero tampoco tendrán contacto directo sobre ellas”.
En el comienzo de esta etapa Moving iniciará “con pilates, yoga, funcional, zumba y strong con una frecuencia de dos veces por semana y con un máximo de diez personas por clase”.
Asimismo para evitar el cruce de alumnos entre una clase y otra, “se establecerán horarios con quince minutos de separación”.
Finalmente Maite Arguinarena dijo que “esto está pensado también para ayudar a la gente tanto en lo físico como en lo psicológico, buscando volver a las actividades que se puedan realizar, creo que a mucha gente le vendrá muy bien para cambiar de ambiente”.
Como hemos visto en los casos consultados, las medidas a adoptar coinciden a grandes rasgos, enmarcándose en un protocolo acordado para todos los locales a nivel nacional.
PROTOCOLO | Desde la Secretaría Nacional de Deportes, su titular Sebastián Bauzá dijo que mantenía la “exhortación a permanecer cerrados” gimnasios y otras instituciones deportivas hasta tanto la comisión técnica que asesora al Presidente de la República no se expida sobre los protocolos que se están presentando, entre los cuales se encuentra el de los casi 4000 gimnasios y academias de todo el país. Asimismo el funcionario agradeció “la paciencia” que han demostrado los empresarios de tales emprendimientos. “Sabemos que los costos son altos y el perjuicio ha sido mucho”, dijo.
Respecto al contenido del protocolo acordado y a estudio de las autoridades nacionales, se incluyen un total de 26 medidas que abarcan las que detallamos más arriba en la consulta con los responsables de algunos gimnasios y academias locales. Se limitará el ingreso a los locales exclusivamente a la población que no constituye grupo de riesgo, se organizarán las tareas de forma que el personal del gimnasio permanezcan a más de dos metros de distancia, deben existir dosificadores desinfectantes, cartelería alusiva al COVID-19.
También el personal de los locales deberá recibir capacitación sobre el tema: cuáles son los riesgos, la forma de contagio, la sintomatología, las medidas preventivas, se deberá exhortar oralmente y mediante cartelería a los alumnos a la sanitización de los elementos antes y después de utilizarlos, los funcionarios deben desinfectar todos los elementos compartidos cada vez que son utilizados (teléfonos, teclados).
Asimismo no se reanudarán actividades que impliquen contacto entre personas. En caso meramente necesario se utilizará guantes y desinfectante para la sanitización una vez terminada cada actividad, el ingreso a vestuarios estará limitado para evitar aglomeraciones. A la salida del vestuario también deberá colocarse una alfombra sanitizante, deben mantenerse los locales ventilados y con renovación de aire continua.
Por Jorge Gambetta.
