El pasado martes 22 de mayo La Semana visitó la escuela 89 “Juana de Ibarbourou”. Tal como lo adelantáramos semanas atrás en el lanzamiento de Biblioteca Solidaria 2018, ese día se organizó una Maratón de Lectura. El evento fue realizado en el marco de la celebración del Día del Libro y de un nuevo aniversario de la creación de la Biblioteca Nacional.
La fresca mañana y la tibia tarde fueron testigos mancomunados con familiares, docentes y vecinos presentes, de la lectura de casi un centenar de niñas y niños que con sus voces despertaban viejas historias narradas en versión de cuentos, poemas que cobraban vida y hasta un refranero popular, muchas veces disparador de nuestras adultas conclusiones, pero interpretado por alumnos de segundo año, sonaban como frescos, ingenuos y recién creados.
Autores de la talla de Mario Delgado Aparaín, Roy Berocay, Norma Lueiro, Juana de Ibarbourou o Rubén Darío, intercambiaban sus obras literarias, con narraciones creadas por los propios niños-autores de sus propias obras, ganadores del certamen literario organizado por el “Club de Afinidades de Ciudad del Plata” el pasado año y presentados públicamente en el libro “Los Quijotes Criollos”, en el marco del Centenario de La Cumparsita y el medio siglo de la creación de “El Quijote”.
La comunidad educativa encabezada por la directora maestra Nancy Zunino y la coordinación de las maestras a cargo de “Biblioteca Solidaria”, Catalina Javier y Natalia Luca, extendieron la invitación a integrar a los alumnos de CEA-UTU (Centros Educativos Asociados), quienes participaron activamente, interviniendo en la apertura y cierre de la actividad lectora dentro del centro educativo.
Entrelazando redes de comunicación, la Asociación Civil ComEnTo (Comunicación Entre Todos), puso a disposición de los organizadores, la Emisora Comunitaria, Ruta FM 93.5, que emitió la grabación del evento por completo el pasado sábado 26 de mayo, adhiriendo de esta forma al Día Nacional del Libro y simultáneamente día de la creación de la Biblioteca Nacional.
Este hecho generó una adrenalina particular entre los protagonistas, quienes prepararon la maratón con varias sesiones de ensayos a cargo de las maestras y maestros de clase.
LECTURA | La actividad comenzó con el detalle de lo que se presentaría, alumnos de sexto año, fueron los maestros de ceremonia presentando cada lectura; al abrir la doble jornada les daban la bienvenida a los presentes y como acto de apertura de la maratón a alumnos de CEA quienes textualmente narraban esta página de nuestra historia nacional: “A instancias de Dámaso Antonio Larrañaga y con el apoyo de José Gervasio Artigas, quienes en 1815 reclamaron al Cabildo la creación de una biblioteca pública, el 26 de mayo de 1816 abrió sus puertas la Biblioteca Pública, la primera del país. Su acervo comprendía 5000 volúmenes entre las donaciones de Larrañaga, José Manuel Pérez Castellano, José Raimundo Guerra, y otras provenientes del convento de San Francisco.
Durante la invasión luso-brasileña (1817-1828), la colección quedó reducida a unos dos mil volúmenes. En 1926 se adquirió el predio del actual edificio y su piedra fundamental fue colocada el 26 de mayo de 1938. La misma pasó a denominarse Biblioteca Nacional a partir de ese año, aunque la nueva sede se ocupó recién en 1955 y fue finalmente inaugurada en forma oficial en 1964. Después en orden ascendente pasaron los alumnos desde primer grado hasta sexto.
La actividad fue cerrada en ambas ocasiones con el poema de Rubén Darío “El Libro”, que lo dejaremos plasmado para el cierre de esta crónica, en defensa del desarrollo que adquirimos cuando tomamos un libro entre nuestras manos, una revista o esta edición de La Semana.
El libro es el telescopio, con el que se ve el infinito, y la estrella, el aerolito y nuestro planeta propio: es también el microscopio, que en una mínima gota, nos hace ver como flota, un orbe a todos igual, que es del coro universal, una bellísima nota. El libro es fuerza, es valor, es poder, es alimento; antorcha del pensamiento y manantial del amor. El libro es llama, es ardor, es sublimidad, consuelo, fuente de vigor y celo, que en sí condensa y encierra lo que hay de grande en la tierra, lo que hay de hermoso en el cielo.
Por Carlos García.
