Los 36 grados de calor del domingo, incentivaron la masiva presencia de bañistas en las costas de todo el país. Kiyú no fue la excepción y aprovechando los últimos días de feriado carnavalero, sus playas tuvieron la visita de miles de personas, para disfrutar el agua, la arena y sus barrancas, en lo que puede ser uno de los últimos fines de semana con tantos veraneantes.
Las arenas repletas de familia compartiendo los pocos días que quedan del verano 2018. Colas de autos agolpados en las calles de balastro que bajan a orillas del Rio de la Plata, gente y más gente en los predios de todas las playas de Kiyú, es lo que se pudo observar este domingo caluroso de febrero.
Luego de un verano lleno de actividades de todo tipo, conciertos nocturnos, elecciones de reinas, criollas, llamadas carnavalescas y exhibiciones deportivas, las personas aprovechan estos últimos días que quedan de la temporada estival.
Rubén, uno de los temporadistas, dice venir del departamento de Flores y menciona que no cambia las playas de Kiyú por ninguna otra. “A pesar que hay bastante gente (para ser Kiyú), la tranquilidad que se impregna acá, es única”, dice. Y lo que La Semana percibió, es que las familias completas son las que resaltan como visitantes principales del balneario.
Silvia, es de San José de Mayo, cuenta que prefiere venir al balneario para el disfrute de sus vacaciones, porque es uno de los lugares perfectos para venir con sus hijos y disfrutar tranquilamente. “Es uno de los lugares más tranquilos y seguros en donde puedo traer a mis hijos”, mencionó.
Tal como lo había dicho el Instituto Uruguayo de Meteorología (Inumet), el domingo fue uno de los más calurosos de la temporada, con una mínima de 17 grados y una máxima de 36. El verano se está despidiendo con todo, aunque el comienzo de la semana previa al inicio de clases se anuncia que traerá agua. Habrá que ver qué pasa el último fin de semana de la temporada, el del 24 y 25 de febrero.
Por Livia Cedeño