Se llevó a cabo el pasado lunes 18 una sesión extraordinaria de la Junta Departamental de San José y en ella participaron Eduardo Bauzá, productor quesero agroecológico y el ingeniero agrónomo Eduardo Arnábal en representación por la Regional San José de la Red Nacional de Agroecología y la doctora María Noel Battaglino, Directora Departamental de Salud.
La sesión se inició por parte de Eduardo Bauzá que dijo que “hay cosas que caen por su propio peso, hay situaciones en las que hoy si se quiere nos vemos más contemplados que muchos años atrás, porque recientemente, en diciembre pasado el Parlamento, por unanimidad, tanto en la cámara de Diputados como en la de Senadores votó la ley que habilita la creación del Plan Nacional de Agroecología, eso nos da a nosotros la fuerza para seguir luchando por estas cosas en las que hace muchos años que estamos”.
Bauzá agregó que “vivimos sometidos a un sistema que nosotros llamamos de producción perverso, en base a la utilización de agrotóxicos, de venenos; lamentablemente, se nos quiere hacer creer que la agricultura no sirve producir si no es con veneno y la agricultura tiene más de 10 mil años”. También mencionó “los desechos de guerra”, que muchas veces “se les busca la utilización, luego de que han sido vilmente usados, se aplican en la agricultura” y ejemplificó con un caso concreto: “el agente naranja, ese terrible herbicida que se usó para quemar la selva en la guerra de Vietnam, luego lo vemos con una naturalidad aterradora en nuestros campos”.
Bauzá se refirió también al tema central del debate, la normativa que determina las distancias libres que deben existir entre los cultivos fumigados y los centros urbanos y las escuelas rurales. Se preguntó “por qué se protege a la población de las ciudades y a los niños en las escuelas y no se protege de la misma manera a las poblaciones rurales y a ese mismo niño cuando sale de la escuela y regresa a su casa”.
Por su parte Eduardo Arnábal habló sobre detalles de la Agroecología y comparó con el sistema de producción transgénica; analizó las dificultades que se vienen generando por la erosión de suelos y las grandes inundaciones que, cada vez más se hacen más intensas. También se refirió a que los productores que utilizan agrotóxicos cada vez gastan más en los productos y que eso incide, por cuestiones de escala, en la cada vez mayor concentración de la tierra.
La doctora María Noel Battaglino por su parte se refirió a lo que, desde su área de trabajo ha tenido que estudiar sobre la incidencia de los agrotóxicos en la salud humana, anotó que en varios países sobre los que ejemplificó, se han realizado estudios que vinculan el uso de algunos productos con el aumento de los índices de algunas patologías. Según la jerarca, se han constatado cambios en el ADN, ello genera influencia en el desarrollo del cáncer, también efectos sobre la flora intestinal y ejemplificó nombrando la enfermedad celíaca. Finalmente abogó por una protección mínima desde el tema de las distancias entre las poblaciones urbanas y rurales y los cultivos sobre los que se aplican los productos, destacando que a su juicio existe una inequidad entre la protección normativa entre las poblaciones urbanas y las del medio rural.
DEBATE| Finalizada la instancia de exposición de los invitados se abrió la discusión del tema en la que quedaron claramente definidas las diferentes posiciones políticas. La bancada del Frente Amplio apoyó el planteo de la Red de Agroecología, mientras que desde el oficialismo se planteó la necesidad de que sea el Poder Ejecutivo el que realice los estudios correspondientes y adopte las medidas de alcance nacional necesarias; se sugería el pasaje del tema a las comisiones correspondientes, pero en general la posición fue responsabilizar al gobierno nacional para establecer normativas al respecto.
Finalmente hubo dos mociones, una presentada por el Frente Amplio en la que se proponía crear una comisión especial para abordar el tema con la participación de tres delegados de la red y delegados de los partidos políticos de la junta, y expedirse en un plazo no mayor a 30 días sobre un proyecto de decreto departamental que contemplara la solicitud de los representantes de la Red Agroecológica, pero la mayoría votó para que el tema pasara a las comisiones de ambiente, de desarrollo y agro y a la de legislación y códigos que ya funcionan en la junta.
Consultado por La Semana, Eduardo Bauzá dijo que “nosotros nos jugamos porque primero hablamos con Camy y nos dio la palabra que estaban los ediles de Alianza, fuimos con María Noel Battaglino, no fui yo solo, fuimos con la Directora Departamental de Salud, tuvimos una reunión con él a fines de diciembre y nos dijo que si, que era totalmente razonable lo que nosotros pretendíamos, que se respetaran los mismos términos de distancia para los que vivimos en el campo que para los que viven en la ciudad. Después hablando con Esteban Aroztegui, que está en la RED, nos explicó su situación, que era suplente de Edil, pero que si lo dejaban entrar él estaba de acuerdo con lo que íbamos a plantear, que él ya lo había planteado en la Junta y lo había seguido por los ministerios, es más, lo presentamos en ese mismo Consejo de Ministros, por eso nos llamó la atención su cambio de posicionamiento”.
Bauzá agregó que “hubo gente que había dado la palabra y no cumplió, y se ofenden y nos dicen que el tema es de resorte nacional, en cada lugar lo podemos hacer pesar, acá en el territorio, que nos conocemos todos y podemos evitar decisiones tecnocráticas, que somos todos vecinos y sabemos lo que estamos padeciendo, hay que tener un poco de consideración con nuestra situación, pero no, se hicieron los osos, obviamente algunos tienen sus presiones, pero tienen un doble discurso, porque por un lado recomiendan usar venenos y por otro dicen ser ecologistas”.
El productor de Ecilda Paullier agregó que “habrá una charla la semana que viene que la va a dar el propio Aroztegui sobre el control de malezas con agrotóxicos, hay otros que han vendido humo en la red como agroecologistas y luchadores y ahora nos dicen que esto hay que resolverlo a nivel nacional, obviamente, que ni me lo digan, si he discutido con el mismo Ministro al respecto muchas veces” pero entiende que, tal como ha sucedido en Canelones, en Maldonado y se está considerando en Montevideo, la prohibición del uso de glifosato por parte de la Intendencia en parques y jardines públicos, se puede perfectamente adoptar medidas de nivel departamental que mejoren las condiciones de vida de la población rural y disminuya su exposición a los productos; “simplemente falta voluntad política” expresó.
EQUIDAD| Bauzá reafirmó que sus propuestas buscan una mayor equidad y que “la fortaleza de nuestro planteo es por qué un niño que va a la escuela rural se lo protege durante esas cuatro horas, pero cuando va a su casa no está protegido?, eso no resiste el menor análisis, por qué si hay una norma que establece que no se puede fumigar a menos de 400 metros de la ciudad, se permite que se fumigue en los jardines dentro de la ciudad y sobre las casas del medio rural?” se preguntó.
Seguidamente el productor dijo que “Alemania está trancando la importación de todo lo que contenga glifosato, porque se dieron cuenta que se estaban envenenando, ¡por qué rechazaron la miel uruguaya? porque tenía glifosato, acá estuvieron 20 años vendiendo el producto como que era biodegradable, luego supimos que no lo era, ¿y entonces?”.
Sobre la normativa nacional Bauzá también fue crítico, dijo que “tenemos un retiro legal que no es eficiente, porque el producto se volatiliza y anda en el aire y las inundaciones lo llevan a los cursos de agua, es increíble el nivel de exposición que tenemos, y ahora se incrementará, porque además del glifosato van llegando el dicamba, el 2.4D, la atraxina y cada vez son más peligrosos y se requiere más cantidad de los productos porque las plantas se hacen resistentes”.
En ese sentido explicó que “el ingeniero argentino Eduardo Cerdá, que estará en San José el próximo 27 de abril, nos decía que con el algodón empezaron con cuatro litros por aplicación y después de 25 años pasaron a 40 litros y cuando empezaron con la primera aplicación del glifosato no había ninguna resistencia y ahora hay más de 30 especies que resisten el glifosato”.
MONTEVIDEO| La Comisión de Medio Ambiente y Salud de la Junta Departamental de Montevideo está considerando en estos momentos un proyecto remitido por el Ejecutivo Departamental que prohíbe a todos los servicios del gobierno departamental y las empresas tercerizadas, el uso de glifosato y otros productos químicos en el tratamiento de malezas en parques, jardines y veredas por los riesgos que implica para la salud de la población.
Cabe destacar que el gobierno de Canelones tiene vigente un Plan de Ordenamiento Territorial Rural que establece zonas libres de agrotóxicos y ha fomentado un plan de reconversión productiva hacia el modelo agroecológico que cuenta con apoyos de diferente tipo a los productores que deseen migrar sus modelos de producción, asimismo hay zonas del departamento protegidas de las fumigaciones, extendiendo a algunas poblaciones de escasa densidad las protecciones establecidas para los centros urbanos.
Por Jorge Gambetta.