Faltaban algunos minutos para las 19 horas del domingo 20 de mayo y ya se percibía que la asistencia a la séptima edición en Libertad de la Marcha del Silencio, iba a ser buena y en efecto, así lo fue, por más que en el medio del movimiento que provoca la fiesta de San Isidro, solo pareciera un puñado. Entre 70 y 80 personas participaron de la movilización.
En silencio, pasada ya la hora señalada, el puñado de vecinos de Libertad, se situó sobre la calle 25 de Agosto -frente al BROU-, y emprendió el silencioso recorrido, entre la sorpresa de quienes venían en ánimo festivo y el respeto de muchos otros que sabían de qué iba la movilización.
Al llegar a la plaza de los 33, en lugar de subir a ella, se continuó por 25 de Agosto hasta llegar a Casa de la Cultura, donde se procedió a cantar el Himno Nacional. Posteriormente, el dirigente de los trabajadores lácteos Osvaldo Espinosa realizó una breve alocución en la que reclamó por verdad y justicia, dándose así por finalizada la actividad.
Por Javier Perdomo