Quizás los hinchas no tenían tan altas expectativas respecto al desempeño de la selección del Sector Capital, pero no tenemos dudas que la dupla técnica conformada por Julio Rodríguez y Augusto Camejo confiaba mucho en su trabajo y en la aplicación técnico táctica de sus futbolistas que quedó demostrada por un lado, con los dos inteligentes planteos realizados por los técnicos, el miércoles ante Colonia en el Supicci – para traerse una victoria histórica por 1 a 0 con gol de Alejandro Gil – y el sábado como locales ante el defensor del título, la selección de Canelones que llegó con la base del equipo campeón del 2017, el mismo cuerpo técnico y sin embargo cayó en el Casto Martínez Laguarda por un contundente 3 a 1 que pudo ser aún más amplio.
San José tuvo un excelente nivel futbolístico y presentó un gran plantel con actuaciones que rayaron la excelencia, como la de Pablo Cabrera, Germán Alayón, Eduardo “Chumbo” Hernández, por citar sólo algunos.
Por su parte el equipo de Rodolfo Armas sabía, según lo dicho antes del debut por su propio entrenador a La Semana, que llegaba con ausencias notorias respecto al plantel que el año pasado logró un buen desempeño. El empate del miércoles 1 a 1 ante Canelones en el Ricardo Reyes dejó una sensación de moderado optimismo aun cuando se escaparon dos puntos como locatarios, pero midiendo el rival de turno y teniendo en cuenta que si Sebastián Berriel metía aquella pelota del final ganaban, se pensó que ante Colonia podría lograrse un buen resultado, sin embargo se perdió y feo y el miércoles sólo cabe ganar ante el Sector Capital para enfrentar las revanchas con otro panorama.
SAN JOSÉ| La selección alba arrancó con pie derecho el pasado miércoles en su visita al Supicci ganándole a Colonia por 1 a 0 con gol de Alejandro Gil a los 19 minutos y controlando el trámite durante todo el partido a pesar que, como era de esperar, la roja se apoderó de la pelota en los últimos tramos del juego y pudo haber empatado si no fuera por la seguridad que transmite Fabio García bajo los tres palos. Hacía muchos años que San José no ganaba en Colonia.
Con ese viento anímico la selección maragata saltó al césped del Estadio Casto Martínez Laguarda el pasado sábado ante Canelones que venía de haber empatado ante la selección de Ecilda en el debut.
La azulgrana venía para llevarse algo ante la blanca maragata, sin embargo la dupla Rodríguez-Camejo demostró su profundo estudio de los rivales, volvió a plantear un fondo sólido, un medio funcional, pero con más marca que en el partido inicial y dejó a Pablo Cabrera como un (aparente), único delantero. El goleador se comió la cancha, fue el mejor jugador del partido, con un despliegue físico admirable enloqueció, junto a Germán Alayón a la defensa canaria, que en muchas situaciones se vio superada en velocidad cuando desde el medio se habilitaba en largo a ambos jugadores.
Pudo ponerse en ventaja rápido la selección locataria cuando a los 9 minutos Alayón sacó un tremendo disparo que pasó apenas arriba del horizontal de Acosta, luego lo tuvo Cabrera, mano a mano con el arquero tras una habilitación estupenda de Eduardo Hernández; en ese momento fue oportuna la acción del arquero que tapó bien la situación.
Canelones respondía con su oficio y sus hombres más importantes, tuvo sus chances por intermedio de Diego Torres y Gastón Ferrero que obligaron a muy buenas intervenciones de Fabio García hasta que en el minuto 16, en una jugada de pizarrón armada desde un tiro de esquina, Delgado y Chacón combinaron perfectamente, cuando el lateral se iba solo hacia el arco fue barrido por la defensa, penal incuestionable que Eduardo Hernández remató de manera perfecta sobre el parante derecho del arquero.
Con la ventaja San José controló con comodidad el trámite del partido, la defensa controló sin mayores zozobras los intentos del rival, fundamentalmente a través de Torres o Ferrero, ya que Pailós parecía más preocupado por ensuciar que por hacer lo que sabe muy bien.
A los 32 Alayón corta una salida visitante y rápidamente habilita a Pablo Cabrera que pudo intentar una definición, pero vio entrar por el medio del área al “Chapa” y se la cedió de manera genial para que el volante sacara un potente remate que dejó sin efecto el intento del arquero por evitar la segunda caída de su valla.
San José se fue al descanso con dos goles de ventaja pero con un hombre menos, ya que en una jugada “rara” sobre la Oribe fue expulsado Daniel Martínez, tranquilidad por el resultado pero obligación para el cuerpo técnico de adoptar algunas medidas preventivas para el complemento.
SEGUNDO TIEMPO | El complemento no pudo comenzar mejor para el equipo local, a los 52 minutos nuevamente Pablo Cabrera habilitó de manera impecable a Fabricio Martínez que definió de gran forma ante la salida del arquero, el aroma de un resultado histórico comenzaba a sobrevolar en la tribuna principal, con la brisa suave y refrescante que llegaba desde el sur.
Canelones no reaccionaba o mejor dicho, San José no permitía que Canelones reaccionara y aprovechara el hombre de más que tenía en el terreno; los más activos en el conjunto azulgrana fueron Torres y Fumero con algo de Pailós. Por su parte San José mantuvo el control del juego y generó chances como un gol de Alayón anulado por una supuesta posición adelantada, otra jugada de pelota quieta en la que Pablo Cabrera le gana a la defensa visitante y estrella el útil en un parante, situaciones que indican claramente que el equipo blanco fue mucho más que su rival.
Sobre el final, a los 88 minutos Pailós le gana en la salida a Fabio García una pelota aérea y convierte el tanto del honor para los canarios. Fue un buen partido de San José, que mantuvo el orden táctico, aún con un hombre menos, con solidaridad de todos en todas las funciones, un Pablo Cabrera exuberante que vimos incluso en su zona defensiva recuperando alguna pelota, un Germán Alayón siempre punzante, activo, participativo, Hernández con su calidad indiscutible al servicio del colectivo, debió salir por un golpe incalificable que ni siquiera fue sancionado, Fabio García cada día más seguro en el arco, la línea final sólida, corrigiendo mediante relevos alguna falla, Martínez , Reyes y Chacón aportando desde el medio en recuperación y proyección ofensiva, lo del principio, inteligencia en el planteo, mucho estudio y trabajo en función del rival, eficacia goleadora, más que justificado el primer lugar del grupo.
ECILDA| Tras un debut que dejó un moderado optimismo por el empate a un tanto el miércoles ante Canelones, los dirigidos por Rodolfo Armas viajaron el sábado al Supicci para enfrentar a una selección de Colonia que llegaba herida por la derrota ante San José tres días antes y sabiendo que debían rescatar al menos un punto para alimentar la chance en un grupo que de antemano se veía como muy difícil para las aspiraciones del sector Interior.
Como podía preverse fue el local que intentó imponer su ritmo en el partido, y a los diez minutos Lucas de Oliveira ganó una pelota entre la zaga visitante y mandó a guardar el útil para poner a la roja en ventaja y trasladarle la presión al equipo de Ecilda.
Colonia fue avanzando en el terreno, aprovechando los espacios con subidas por los laterales y habilitaciones precisas a los veloces delanteros para mantener un jaque casi constante sobre el arco de Luis Rodríguez y a los 30 minutos Ezequiel Casaña, mediante una estupenda ejecución de un tiro libre aumentó la ventaja del local que comenzaba a cerrar un partido que necesitaba ganar.
En la vereda de enfrente el equipo azul se veía maniatado por la presión rival, anímicamente tocado por los goles en su arco, sin poder generar, a pesar del buen trabajo de Ramos en el mediocampo, un circuito ofensivo que pudiera llegar con claridad hasta la zona de riesgo locataria.
En el segundo tiempo Armas intentó potenciar el trabajo del mediocampo, Chamorro fue un buen apoyo para el juego de Ramos, Berriel le aportó otra dinámica a la delantera, pero Colonia mantenía la ventaja sin padecer demasiado en su última zona.
Cuando el trámite parecía favorable para la visita, que comenzaba a presionar a su rival, una jugada desafortunada quiso que el balón rozara la mano de Agustín Belarmino, el penal indiscutible fue bien ejecutado por Leonardo Herrera, el 3 a 0 comenzaba a transformarse en irremontable para el conjunto ecildense a pesar de la entrega de sus hombres.
Habiendo perdido cinco de seis puntos disputados el panorama no aparece como favorable para el Sector Interior que el miércoles recibirá al líder del grupo, el conjunto de la capital departamental que viene con puntaje perfecto y para Ecilda resulta impostergable una victoria en ese choque para afrontar la rueda de revanchas con la chance viva de lograr la clasificación.
Por Jorge Gambetta
Fotos: Sebastián Parentelli.
