Culminadas cinco de las seis etapas del Concurso Oficial, con la suspensión de la segunda por las lluvias del martes 29, el nivel que se viene observando es en líneas generales de bueno a muy bueno en todas las categorías. Por una cuestión de espacio nos referiremos hoy a tres de ellas, dejando Parodistas y Revistas para nuestra próxima entrega.
MURGAS| La Croata abrió el Concurso Oficial el lunes 28. El viejo sueño de su director responsable, Gustavo Vodanovich que este año pudo poner una murga en el “Ramón Collazo” y subir junto a su hijo Santiago como director escénico, muchos serán los que se han deleitado con la videoteca que “El Croata” nos ha regalado a los fanáticos a través de su canal en Youtube.
“El día después” es el espectáculo de La Croata, que se plantó con una buena puesta en escena, trajes acordes y un coro sin figuras pero que sonó bastante bien tras un arranque con algún problema, un texto que tendrán que trabajar para alcanzar una mayor efectividad en el humor, su discurso es frontal y tiene puntos muy altos en cuanto al mensaje que quiere dar. El toque negativo fue la lesión de su director escénico, Santiago Vodanovich cuando la murga se aprestaba a entonar la bajada, tras una pirueta cayó mal y se dislocó la rodilla, lo que lo deja fuera del resto del Concurso Oficial.
La Martingala tuvo serios problemas de sonido en la batería que por momentos opacó al potente coro, corregida la dificultad la propuesta llegó de mejor forma. El vestuario es adecuado, colorido sin excesos, los textos tienen puntos altos y bajos que seguramente serán pulidos en el rodaje por las tablas pues tiene elementos para hacerlo.
El cierre de la primera etapa marcó una pasada destacada de La Venganza de los Utileros que mostró la madurez adquirida por este título que viene de Murga Joven. Títulos inteligentes y efectivos, con un dominio brutal de la ironía en el tratamiento de los temas de actualidad, un coro claro y potente con gran dinámica escénica.
El miércoles y con entradas agotadas se produjo el regreso de Agarrate Catalina que cerró la etapa con un espectáculo deslumbrante que denominaron Los Defensores de las Causas Perdidas. El coro pegó fuerte desde la primera a la última nota, los solos de Freddy “El Zurdo” Bessio son inigualables, el vestuario fantástico como acostumbra Paula Villalba, los textos con la poética de los hermanos Yamandú y Tabaré Cardozo y sostenidos por una interpretación redondita que culminó con un emotivo homenaje a las murgas del barrio de La Teja, significativas en las horas más oscuras de la dictadura.
El jueves cerró con Doña Bastarda, murga revelación del carnaval pasado y que este año llegaba con un plantel potenciado por figuras como Alejandro Balbis y Marcel Keoroglián y con puesta en escena de Pablo “Pinocho” Routín. Con una evocación a la Grecia que acunó la Democracia la murga recorre las discusiones en el ágora con textos bien trabajados que nos dicen que la memoria es básica para mirar al futuro, el cuplé de la caverna alcanza un nivel extraordinario, vestuario impresionante, también de Paula Villalba, un lujo de espectáculo con una retirada tremenda.
Lamentablemente la Bastarda fue duramente sancionada por el Jurado, se le restarán 10 puntos por bajar fuera de tiempo y además, por exceder los 15 minutos en el uso de la guitarra, también se le deducirán otros 72 puntos, lo que la deja en muy mala posición para aspirar a definir el Concurso.
El viernes pasó La Mojigata, el cachetazo de humor fresco que ya es casi imprescindible para el Concurso de la categoría. La murga sube a divertirse y a divertir al público, sabe que puede lograr el pasaje a su tercera Liguilla y no mira al podio como objetivo.
Los textos siempre inteligentes pueden ser mejorados para lograr más efectividad en la segunda pasada, en tanto el coro también tiene margen para mejorar, pero estos muchachos son conscientes que su papel en el “Collazo” está mucho más allá de alcanzar la excelencia vocal.
Tras el parate del sábado por la celebración de Iemanjá, el domingo vimos dos espectáculos murgueros ubicados en todo sentido en polos opuestos. A primera hora pasó Metele que son Pasteles con su humor inteligente y desenfadado, despreocupados por definiciones y puntos, aunque se atendieron los rubros correctamente, sorprendiendo con lo que fue la mejor crítica político-social en su tratamiento del neoliberalismo y su discruso “Pa la Tribuna”.
Cerró la etapa dominguera Patos Cabreros, un murgón impresionante al mejor estilo sesentoso, coro potente, trajes fastuosos, buenos textos que tuvieron algunos vaivenes en la interpretación, pero no defraudaron a su fiel hinchada. Quedan aún muchos espectáculos para ver en esta categoría que será sin dudas la más competitiva.
HUMORISTAS| Los Rolin cumplieron un buen debut en la – siempre difícil – primera etapa del Concurso el pasado lunes 28, en un Teatro de Verano que convocó poco público. El conjunto que dirigen Martín Prado y Rodrigo Cáceres presentó su espectáculo “Perdiendo el tiempo” que tuvo una muy buena visión estética, con buen vestuario y cuidada puesta en escena en sus cuadros, un coro muy bien trabajado y destacado aporte de Claudia Puerto y Carlos Paredes que brillan muy alto, sobre todo en la canción final que interpretan a dúo y que es un pico alto de emoción.
Fue en lo humorístico, que el espectáculo de los Rolin mostró sus puntos más débiles y seguramente deberán trabajar en el rodaje que puedan tener hasta su segunda pasada por el Ramón Collazo, Martín Prado, Eduardo “el Canario” Fernández, Rodrigo Cáceres e Ivén Metettieri son quienes conducen las humoradas que logran algunos puntos altos en la respuesta de la platea pero no se sostienen en los 55 minutos de la presentación a pesar de que algunas ideas están muy buenas, como la de la galería de arte o los vikingos que tienen seguramente mucho más para darle al espectáculo que muestra las formas que encontramos los humanos para perder el tiempo.
Por su parte Sociedad Anónima se presentó el miércoles 30 con su espectáculo “Tribal – En el lugar del otro”, que comenzó de forma sorpresiva con un camarógrafo interactuando con el presentador oficial del Concurso Álvaro Recoba desatando la hilaridad de la colmada platea. Los maragatos lograron sostener a lo largo de su presentación su nivel humorístico, sin descuidar el resto de los rubros, con un coro que sonó potente y claro, mientras recorren las diversas tribus que componen la sociedad, a veces enfrentadas o invisibles para el resto, un punto alto fue el Haka criollo, emulando la arenga de los All Blacks mientras que la emoción se logró con el homenaje a Omar Gutiérrez y con una brillante interpretación de lenguaje de señas a cargo de Paula Barceló que bajo el silencio total de la banda y del Teatro todo logró realmente poner a cada uno en el lugar del otro y recibió una explosión impresionante desde la tribuna.
El jueves se presentó Cyranos, el último campeón y tras un comienzo un tanto dubitativo el espectáculo se fue afirmando de la mano de las Ximenas, Márquez y Vázquez que escribieron y conducen los textos de manera magistral. Por momentos la interpretación es tan vertiginosa que algunos remates no llegaron con claridad, ¿o será que no le dan tiempo al espectador a pensar lo suficiente?, la efectividad que lograron con los carteles para sortear la “prohibición” de rematar los chistes y haciendo que la platea fuera quien lo hiciera, fue una brillante muestra de creatividad. El grupo hizo una tremenda defensa del título con una cuidadosa atención de rubros.
Tendremos que esperar para ver a los otros tres participantes, pero desde ya podemos prever una definición muy pareja en una categoría que no ha escatimado hasta ahora ningún esfuerzo en las puestas en escena.
COMPARSAS| Integración se presentó el miércoles con el mejor espectáculo que le recordamos, un texto brillante que recorre el diálogo didáctico y entretenido entre el candombe y la música. A propósito, se tendrá que cuidar el volumen de la banda que por momento opaca a los buenos cantantes y al coro, coreografías bien trabajadas con el lógico destaque de tres vedettes como Florencia Gularte, Lola Acosta y Paola Correa que se roban la platea.
El jueves fue el turno de La Carpintera Roh que recorrió el tema de La Libertad como eje para profundizar en la reivindicación de los derechos de género y sexuales, presentó una buena estética, textos correctos y bien interpretados, una cuerda que transitó por fusiones diversas, quizás acompañando la diversidad que se defiende.
El viernes la comparsa Valores golpeó fuerte desde su presentación en el escenario, colorido y potencia interpretativa, buena selección musical, un cuerpo de baile muy bien trabajado, en general una puesta en escena comprometida con su texto y cuidadosa de todos los rubros, una muy grata sorpresa.
El domingo finalmente pasó Julio Sosa “Canela” con su Tronar de Tambores, aunque la aparición del veterano líder de 86 años se produjo recién a los 40 minutos para recibir la ovación de la platea, el espectáculo apunta a la cultura afro, las raíces, guiado por una artista plástica que busca a través de la pintura aquellas semillas que fortalezcan la identidad de su raza. Color y buen gusto, detalles muy cuidados en todos los rubros, buen cuerpo de baile, cuerdas de tambores y personajes bien logrados, algunos detalles de interpretación que seguramente serán ajustados para su segunda presentación.
Por Jorge Gambetta.
