Este viernes 27 de octubre a las 20 y 30 horas, el grupo “Mujeres en Libertad”, presenta en Casa de la Cultura, el espectáculo de Gabriela Rodríguez que lleva como nombre “Mujer de Agua”, una interpretación musical de un trío de cuerdas, que además será accesible a personas sordas, ya que habrá una intérprete de señas que transmitirá lo que la artista vaya interpretando en escena.
Para conocer de qué se trata esta propuesta musical, La Semana se contactó con la intérprete, quien en un amable diálogo contó a su periódico que la propuesta de Mujer de Agua “surge de la grabación de un CD y a la vez es una forma de transitar la música. Es una sucesión de canciones que tienen que ver con momentos de vida que si bien son personales, me trascienden”.
Explicó luego que el espectáculo se denomina «Mujer de agua, canciones desde una perspectiva femenina de la vida», y que está situado “desde la vida misma”.
“Arranca con efectos de nacimiento, el agua, los sonidos están en forma permanente, yo los hago con la voz. Hago un parto inicial, para después ir transitando por canciones ancestrales, canciones que cantaba mi abuela, que trajeron nuestros ancestros desde sus lugares de origen”, cuenta la artista, que cuenta con familiares residiendo en Libertad.
Prosiguió diciendo que después del “nacimiento” hay “momentos de vida y de muerte, de amores y desamores, que van transcurriendo, yo los ubico contextualmente y voy llevando al espectador por el espectáculo”.
Para la artista llegar a Libertad tiene muchas significancias: “cuando digo que el espectáculo es una forma de transitar, tiene que ver con lo juglarezco, yo me inspiro cada vez que voy a un lugar e ir a Libertad no es como ir a cualquier otro pueblo”, ya que contó que si bien ahora tiene parientes en la ciudad, ya la “conocía de cuando iba a visitar a mi hermano al penal, éramos decenas de familiares que invadíamos la plaza de la ciudad. Es una oportunidad de encontrarme con ustedes, que ya son míos”.
El recuerdo que Gabriela Rodríguez tiene de aquella ciudad de Libertad es que “fue sitiada e invadida de mil formas”.
SENSIBILIDAD | Cuenta Rodríguez que en su espectáculo “me coloco como mujer y planteo la posibilidad de construir desde lo sensible, desde una forma de mirarnos diferente, sin barreras, de manera de desterrar el patriarcado, que es una cultura que nos atraviesa a todos y hacer ver que desde el arte podés generar otra forma de pararte”.
“Para nosotras las mujeres, los derechos humanos pasan por los más despojados de sus derechos, las mujeres somos más del 50% de la población y somos invisibilizadas y somos noticias cuando nos matan”, contó.
Opinó que también en materia artística, hay una invisibilización de las mujeres. “Nos cuesta mucho más que a los hombres, muchísimo más, pero es un tema de sensibilidad, haciendo juntos, con los varones también, podemos hacer un mundo diferente. Estamos en el mismo barco de la vida, no se trata de excluir ni ir en contra de los varones, sino de construir juntos. Comprometernos a construir un mundo más solidario y generoso. Uruguay es uno de los países que tiene mayor cantidad de feminicidio de acuerdo a su población. Estamos juntos en el mismo barco y tenemos que ser implacables”.
Consultada respecto a cómo se define estilísticamente, dijo que hace de todo. “Me dediqué al oficio de la música y comparo a la música con el obrero de la construcción, cumplís roles diferentes. El espectáculo transita por diferentes estilos, de acuerdo a los instrumentos, soy muy abierta en ese sentido”.
A la hora de invitar al público a concurrir a este espectáculo, dijo que “es un honor y un placer ir a Libertad y los invito a todos a participar. Van a ir a un espectáculo que es un viaje a tú propia humanidad. Vas escuchando canciones y recordás tu propia vida. La música no tiene tiempo. El que vaya se va a encontrar con su propia vida”.
Cabe mencionar que las entradas tienen un precio único de 150 pesos y la pueden adquirir a cualquiera de las integrantes de Mujeres en Libertad o en la propia Casa de la Cultura.
Por Javier Perdomo
