Según estrictos reglamentos una murga debe tener un máximo de 17 integrantes incluidos los tres instrumentos básicos, bombo, platos y redoblante, pero cuando uno disfruta un espectáculo murguero sabe que la murga es mucho más de lo que muestra, hay componentes que no salen a escena y tienen su papel fundamental en el proceso que llevó a ese resultado, letrista, maquillador, vestuarista, iluminador y tantos otros oficios tan importantes como cualquiera de ellos hacen la riqueza de un género que, según dijo Adrián Smith “es uno de los más completos a nivel mundial”.
Y la oportunidad de comprender esa afirmación y meterse a “la cocina” de este popular género carnavalero estará abierta para todas y todos los interesados a partir del próximo miércoles 13 de junio a las 20 horas cuando en la Casa de la Cultura de Libertad comience un nuevo Taller de Murga que en esta oportunidad ofrece la chance agregada de recibir el aporte de dos especialistas con diferentes experiencias, Fito Lacava es uno de los directores más destacados del Carnaval uruguayo, reconocido como Figura Máxima en 2000 y pasaje por títulos de los más selectos del género, mientras que Adrián Smith es docente de música en Secundaria, dirige el Coro del Liceo Libertad, pero hace ocho años que además incursiona en la movida Murga Joven que ha sacudido al Carnaval todo, entre ambos prometen una oferta amplia de estilos que sin dudas enriquecerá la propuesta.
LACAVA| Rodolfo “Fito” Lacava explicó que “el taller surgió a instancias de Centros MEC, se había hecho una primera experiencia hace un tiempo con Fernando Esteche y fue muy bueno el movimiento que se creó ahí en la ciudad y la idea es retomar un poco eso con Adrián con el que tenemos un vínculo muy especial a través del Carnaval”.
Al respecto Lacava agregó que “a mi me gusta trabajar en equipo y un taller está muy bueno para eso, sobre todo teniendo en cuenta los conocimientos que Adrián tiene en lo coral, es director del coro del liceo, es docente y la idea es distribuir las funciones de expresión corporal y puesta en escena de la que me haría cargo yo y él más en lo que tiene que ver con la musicalidad y el coro”.
Pero un taller abierto como es el que se propone tiene sus desafíos. Lacava dijo que “tendremos que tener en cuenta también las edades del grupo que se pueda formar, en Rafael Peraza – donde es casi seguro que se inicie otro taller – por ejemplo, la situación es diferente porque ya hay un grupo conformado y el objetivo concreto es hacer una murga y en Libertad la idea es retomar aquella experiencia que tuvimos con Fernando y ver qué repercusión tiene, haremos una visita previa por los centros educativos y promoción para ver qué gente puede interesarse por el proyecto”.
VARIEDAD| Por eso es que la propuesta va más allá de solamente cantar murga, “queremos profundizar en el género, que puede despertar en la gente muchas cosas, que los interesados no piensen que para hacer un taller de murga hay que cantar bien, eso es un error, porque puede maquillar, iluminar, hacer el vestuario, interpretar un cuplé, que pueda hacer reír, que pueda tocar un instrumento, que pueda bailar, que pueda escribir o aprender cómo se escribe un texto de murga y todo eso amplía el número de participantes”.
“Fito” Lacava agregó que si bien “obviamente la murga es un género cantado, necesita alimentarse con otras cosas, no sólo es subir al escenario, la idea es hacer una muestra a fin de año, pero si no pinta una muestra cantando, puede surgir una muestra de dibujos, de diseños, de maquillajes, eso surgirá de las características y la decisión del grupo con el que vayamos a trabajar, pero que la gente sepa que aunque no sepa o no le guste cantar y subirse a un escenario hay muchas otras cosas que puede aportar al grupo”.
Finalmente Lacava destacó que “lo otro y muy importante es que el taller es totalmente gratuito, aquí nadie tiene que pagar absolutamente nada porque está el Centro MEC detrás impulsando la actividad, y que la Casa de la Cultura es un lugar muy lindo para disfrutar los encuentros de los miércoles de nochecita”.
SMITH| Por su parte Adrián Smith dijo que “ser docente de música en Secundaria te habilita también para ser director de coros liceales y además hace ocho años que salgo en Murga Joven y esa experiencia es muy diferente a lo que es la murga clásica, que es un poco la experiencia que tiene “Fito”, él tiene mucho para aportar por sus años de escenario y lo mío va a orientarse a los arreglos y algo de la puesta en escena, el movimiento de la murga joven se desarrolla un poco más que la murga clásica que quizás apuesta más al canto potente”.
Smith agregó que llegó “a murga joven como arreglador, pero se van aprendiendo cosas de puesta en escena, de textos, que por lo que se puede ver en el Teatro de Verano es lo principal de la propuesta joven, nuestra apuesta para el taller es creativa, haremos ejercicios en cuanto a textos, actuación, va a ser dinámico y con una mezcla de muchas cosas que irán surgiendo de los propios participantes”.
ESTILOS| Hay diferencias obvias entre las propuestas de las murgas jóvenes, como Cayó la Cabra o Metele que son Pasteles y clásicas como Curtidores de Hongos o Saltimbanquis, Smith dijo que “lo más fresco de murga joven es que dice más sin cuestionarse el cómo, de pronto la murga clásica busca más la aprobación del público, la murga joven dice y si se aprueba o no, da igual, sigue siendo el canto comprometido de la murga en general como género, pero se anima más en la incorporación de músicas, a romper con las métricas, a meter más palabras de las que entran en una estrofa, el juego va a ser parte del taller, no van a ser clases puntuales, para que sin darse cuenta el grupo se transforme en la murga del barrio”.
Smith agregó que “la murga como género es uno de los más completos a nivel mundial, y no solamente se va a cantar a una murga, de pronto a alguien le gusta hacer vestuarios, otro puede armar lo escénico y no subir al escenario, integrarse a la batería y uno de mis objetivos personales también es difundir un poco la movida de murga joven en el interior”.
El taller que se propone buscará ser atractivo tanto “para el que le gusta el género, que ya tiene conocimientos o experiencias de murga pero también para aquel que dice que a las murgas no les entiende nada, eso pasaba hace cuarenta años, la gente necesita arrimarse y por eso los talleres son abiertos para que todos puedan aportar, gente que toque diferentes instrumentos, hoy los espectáculos mechan otras cosas, como lo hizo Contrafarsa hace un tiempo incluyendo violines o Falta y Resto cuando incorporó una cantante de rap y eso es gracias a la riqueza que tiene la murga como género y eso es lo que queremos difundir”.
En grupos numerosos no es fácil lograr el compromiso de todos pero tanto Lacava como Smith tienen vasta experiencia en el manejo de la dinámica de grupo, y ello es fundamental para integrar y estimular la creación colectiva, donde cada pieza es fundamental para el objetivo que se determine, alcanzando la motivación de todos los participantes.
Como oriundo de Rafael Perazza Smith dijo que el año pasado realizó un taller en la localidad y que fue poco como para “devolverle algo al pueblo, porque soy de allí y quise volcar mi experiencia de alguna manera, al principio parecía que sería un coro y finalmente terminó siendo una murga entre nueve o diez personas, cuando terminamos la presentación había como veinte nuevos interesados, porque la murga genera ese efecto contagio y por eso seguramente también estemos con “Fito” en una propuesta similar en Rafael Perazza donde hay un grupo ya formado e interesado”.
Sin dudas que se trata de una propuesta más que interesante y sin costo alguno, al alcance de quienes tengan ganas de acercarse para incursionar en un género popular con una amplísima variedad de opciones para aportar desde diferentes gustos y habilidades personales y al mismo tiempo recibir la carga de enseñanzas y experiencias de los responsables.
Por Jorge Gambetta.
